Calvo Sotelo intentará, en París, clarificar las relaciones franco-españolas

El presidente del Gobierno español, Leopoldo Calvo Sotelo, viaja hoy a París con la intención de que sus conversaciones con los dirigentes del vecino país sirvan para abrir una nueva etapa en las relaciones bilaterales, sometidas en los últimos tiempos a la tensión derivada de la negativa de Francia al ingreso de España en la CEE y de la pasividad de la Administración de aquel país ante el problema del terrorismo vasco.Calvo Sotelo estará en París sólo cinco horas, y en el curso de ellas tiene previsto mantener conversaciones con el presidente, François Mitterrand, y con el primer ministro, Pierre Mauroy. La Administración francesa está interesada, por su parte, en mejorar las relaciones de los Gobiernos de París y Madrid, y concede a la visita «una importancia política cierta».

El cambio político experimentado en Francia con el acceso de Mitterrand al poder sigue siendo un punto de esperanza para los dirigentes españoles y, aunque el Gobierno Calvo Sotelo no espera resultados inmediatos, cree que de las conversaciones que se desarrollen hoy en París se clarifiquen las posiciones galas.

En la reciente visita que realizó a Madrid el jefe de la diplomacia gala, Claude Cheysson, la nueva Administración francesa puso ya de manifiesto su interés por mejorar las relaciones bilaterales.

Calvo Sotelo pedirá por enésima vez a Francia el desbloqueo negociador con la CEE, o sea, la apertura del capítulo agrícola del diálogo Madrid-Bruselas, y se mostrará interesado por la actitud que la Administración gala va a adoptar en breve sobre las extradiciones de terroristas vascos. En este sentido, un portavoz de Mitterrand dijo ayer que «Francia es una tierra de asilo», aunque reconoció que «condena el terrorismo y vigilará para que no se produzcan actividades de este género en su suelo».

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