La Unesco estudia en París medidas de apoyo a los medios de comunicación del Tercer Mundo

Desde el pasado día 15, y hasta el lunes inmediato, se está celebrando en París, en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), una importante y probablemente decisiva conferencia sobre la ayuda al Tercer Mundo en materia informativa. Según informes recogidos por EL PAIS, «no sería imposible que el organismo de ayuda a los países del Tercer Mundo en materia de información sea operacional».

Hay que recordar que el Consejo Intergubernamental del Programa Internacional para el Desarrollo de la Comunicación (PIDC) fue creado en el seno de las Naciones Unidas. La idea original le corresponde a la delegación de Estados Unidos, que la propuso ya en 1978. El PIDC es un mecanismo intergubernamental, de carácter operativo, y cuya misión fundamental consistirá, primero, en desarrollar el conocimiento de la situación y las necesidades informativas de los diversos países,La sesión que el PIDC ha inaugurado ahora en la Unesco es la primera y, según expresión del ponente de Estados Unidos, que ayer se dirigió a la conferencia, «este primer trabajo nuestro será decisivo, ya que si fracasábamos de entrada en nuestros intentos, el PIDC quedaría probablemente marcado por ese fallo para largo tiempo». El director general de la Unesco, Amadou-Mahtar M'Bow, en su discurso de introducción, señaló, por su parte, lo que se considera como el objetivo más importante de esta conferencia: «En lo sucesivo, deberían concederse las preferencias a las medidas prácticas de carácter operacional que permitan reforzar las capacidades de comunicación de los países».

Para llegar a esa fase operacional, el PIDC tiene que conseguir dos cosas esenciales en esta primera sesión que celebra en París: primero, convencer a todos los países miembros de la Unesco de la necesidad de desarrollar los medios de comunicación en el Tercer Mundo. Segundo, reunir los medios financieros necesarios para realizar su proyecto.

La cuenta corriente especial para esto, creada en la Unesco para recibir las contribuciones diversas, según el producto establecido por el PIDC, será alimentada por las aportaciones de los Estados miembros por todo tipo de organizaciones públicas y privadas, por particulares que lo deseen, por otro tipo de organismos intergubernamentales. El director general de la Unesco declaró ante la conferencia que el Gobierno holandés ya le ha prometido una aportación de 600.000 dólares, y que otros países han confirmado su intención de participar en la financiación del PIDC.

Hasta ayer, la conferencia no había entrado de lleno en este asunto determinante, pero el clima general sobre la cuestión, al menos entre los más importantes países occidentales, dejaba entrever un denominador común: « Estamos dispuestos a participar, pero hemos de saber a qué países va el dinero». Esta prevención de carácter selectivo desvela la influencia indirecta sobre el futuro del PIDC del serio contencioso sobre la rivalidad Occidente-Tercer Mundo en materia informativa surgida en la Unesco.