Acuerdo entre PNV, PSOE y UCD para normalizar la gestión municipal de San Sebastián

El Ayuntamiento de San Sebastián ha aprobado por mayoría, a los dos años de su elección democrática, unas normas reguladoras de plenos y permanentes, que pretenden normalizar la vida municipal. La celebración de sesiones plenarias se encuentra paralizada desde la segunda semana de mayo a causa de la negativa de Herri Batasuna (HB) a aceptar una regulación de¡ tratamiento de temas extramunicipales, que considera restrictiva de sus libertades.

Las normas aprobadas el martes, gracias a los votos del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Partido Socialista de Euskadi (PSE-PSOE) y Coordinadora Independiente (UCD), establecen la inclusión en el orden del día de mociones ajenas a las competencias estrictas del Ayuntamiento, siempre que el alcalde cuente para ello con la opinión favorable de tres de los cinco grupos municipales. Si se tiene en cuenta que este tipo de propuestas procede en la mayoría de los casos de HB, y con menor frecuencia de Euskadiko Ezkerra (EE), la normativa convierte a los socialistas en árbitros, ya que el PNV es contrario al debate de cuestiones extrañas a la gestión municipal.La normativa que regula el desarrollo de sesiones plenarias sustituye a un decreto anterior de la alcaldía, que fue vivamente criticado, en el que el presidente de la Corporación, Jesús María Alkain, del PNV, se atribuía la facultad de aceptar o rechazar la presencia de mociones extramunicipales en el orden del día. Un recurso contra el decreto, presentado por el PSE-PSOE, pedía su anulación y la redacción de unas normas que debería aprobar el pleno.

Sin embargo, no existe garantía de que la situación vaya a entrar en fase de normalidad. HB, que boicoteó el último pleno ordinario al negarse sus concejales a abandonar el uso de la palabra, como protesta por el decreto de la alcaldía, ha anunciado que tampoco va a admitir el reglamento aprobado por la mayoría de los corporativos. Para subrayar su actitud, los seis representantes de la coalición independentista abandonaron el salón el martes antes de que se procediera a emitir el voto, mientras EE prefería abstenerse, al ver rechazadas sus enmiendas. Los restantes grupos temen que HB mantenga su posición el viernes, cuando se tratará de celebrar un pleno ordinario para el que existen temas acumulados durante dos meses.

No hay mayoría estable

En el meollo de la agitación que se produce en el Ayuntamiento donostiarra hay que situar, según el PSE y EE la negativa de los nacionalistas, que cuentan con la minoría mayor, a establecer una alianza mayoritaria y estable con otros grupos basada en un programa de gobierno negociado. Esta situación obliga a fundamentar la gestión municipal en coincidencias de voto puramente ocasionales sobre cada tema concreto.A diferencia de la mayoría de los ayuntamientos, en San Sebastián se llegó tras las elecciones a una especie de «gobierno de concentración». Cada grupo cuenta con una parcela de poder municipal, reflejado en la presidencia de comisiones, proporcional al número de sus concejales.