Aborto y divorcio
Llega en estos días a la opinión pública la sorprendente noticia de que va a celebrarse el 16 de los corrientes, en Bilbao, el tristemente célebre juicio por el «presunto delito» de aborto contra once mujeres que en 1979 fue suspendido a causa en gran parte por la presión del movimiento feminista del Estado español y en gran parte también por la campaña desencadenada por los medios de comunicación, siendo EL PAIS protagonista ejemplar en ella.Tenemos la «percepción clara y distinta», con toda la intencionalidal que dio Descartes a esta definición, de que se trata intencionadamente de mezclar en olla revuelta, con el objetivo de sembrar la confusión, cuanto atañe a las mujeres para lograr el debilitamiento de su lucha con la conocida táctica de la dispersión (todos estamos al tanto, a través de la Prensa, radio y televisión, de que en estos días el Senado está mutilando el proyecto de ley de Divorcio ya, aprobado en el Congreso.
Es tremenda la injusticia de este juicio, como la de los que pudieran ser llevados sucesivamente a cabo por iguales motivos. El total de la población española, y más concretamente el 52% de ella, es decir, las mujeres, tienen el deber y el derecho de conocer y disfrutar de cuanto en relación con planificación familiar y métodos anticonceptivos es moneda en curso en la comunidad de todos los países en cuya compañía, con bombo y platillos, nos queremos integrar.
Las mujeres, quede claro, no queremos abortar, esto debería de ser grabado a fuego en la mente de todos nuestros jueces y de todo ciudadano de a pie. Abortar es una agresión gravísima contra nuestra propia identidad, y aquellas que se encuentran en la necesidad de hacerlo por las razones que aquí no hay lugar a exponer por ser de sobra conocidas, no es precisamente una tarta deliciosa con la que se regalan.
Sensibilícese, pues, la conciencia pública para exigir al Gobierno esa información rápida y clara y la gratuidad en la expedición de los fármacos necesarios por parte de la Seguridad Social.
Sensibilícese a sí mismo para oponerse a juicios tan vergonzosos como el que va a realizarse para más escarnio sobre mujeres qpe por falta de medios no han podido volar a países vecinos como en masa lo hacen otras mujeres de estamentos acomodados, con todo derecho, por supuesto, pero contra el derecho de las que no pueden utilizarlo.
Y sensibilícese de man era especial la institución judicial, ya que el prestigio de ella depende de la actuación de todos y de cada uno de sus miembros ante el juicio del día 16, en el que exigimos, por entenderlo de justicia, que sea sobreseída la ausa.
Las mujeres quisiéramos mostrarles que la defensa de la vida discurre por otros cauces y no verlo lleva a pasar por la criba agujereada de la historia infelices mosquitos al tiempo que pasan holgadamente legendarios camellos. /
, en representación de la Federación Provincial de Asociaciones de Mujeres de Madrid.
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