El semanario vasco "Ere" cierra por dificultades económicas

El semanario vasco Ere publica su último número mañana, miércoles. El cierre de la revista es debido a las dificultades económicas y a la cifra de ventas insuficiente, situación que se agrava durante el período veraniego, aunque podría reaparecer después del verano, con una periodicidad mensual. La edición que aparece mañana hace la número 89, y está dedicada a sintetizar los principales acontecimientos de la vida del País Vasco durante los más de dos años en que la revista ha acudido a la cita con sus lectores.Elaborada desde una perspectiva política próxima a la coalición de Euskadico Ezkerra, «basta eliminar la erre del título... », se comentaba malintencionadamente; desde Ere se ha llevado a cabo, no obstante, un esfuerzo notable de apertura a todas las corrientes de izquierda vasca parlamentaria y de rigor informativo. En un mercado de Prensa como el vasco, dominado en mayor medida de lo normal por los compromisos partidistas, en Efe encontraron refugio también las preocupaciones culturales y sociológicas, apenas en parte a otros medios más poderosos.

Como los ya desaparecidos Garaia y Berriak, Ere representó un intento de sectores políticos y sociales desplazados o insuficientemente atendidos en la Prensa diaria de Euskadi, para contar con su propia plataforma de expresión y presencia. Punio y llora de Euskal Herría es la Única superviviente, gracias al amparo del diario Egin, de lo que en Euskadi ha representado el fracaso de la fórmula semanal.

Cuarto aniversario de "Deia"

El diario Deia.(Llamada) cumplió ayer su cuarto año con este motivo. El periódico publicó el domingo un editorial en el que se recuerda su intención de hacer «un medio de comunicación vasco, bilingüe, animado por una filosofía política nacionalista». Deia fue el primer diario que nació en Euskadi al amparo de la transición democrática, seguido luego de Egin.Próximo al Partido Nacionalista Vasco, el periódico sostiene activamente la política del Gobierno de Vitoria desde su constitución y agudiza su posición crítica frente a la violencia de ETA.