Bayón resiste las presiones políticas para derogar su decreto de reconversión

El ministro de Industria, Ignacio Bayón, expuso ayer, en Oviedo, con toda rotundidad su negativa a la derogación parcial del decreto de reconversión de la siderurgia integral, que había sido solicitada por todas las fuerzas políticas parlamentarias asturianas, incluida UCD, sindicatos, empresarios, cámaras de comercio y juntas de obras de los puertos de Gijón y Avilés.

Cuarenta o cincuenta trabajadores, al parecer de CC OO, abuchearon al ministro durante la visita oficial que realizó ayer a las factorías de Ensidesa, situadas en Gijón y Avilés. A su paso por algunas instalaciones hicieron sonar las sirenas y golpearon sus cascos contra las barandillas en señal de protesta. Bayón calificó, sin embargo, de «muy positiva» la visita en conversación mantenida con EL PAIS. En su opinión, tanto el tratamiento financiero como los 15.000 millones de pesetas de inversiones que recibirá de inmediato Ensidesa supone la inyección más importante aportada a la economía asturiana en los últimos veinticinco años. «Han quedado convencidos todos», agregó, «los partidos, en primer lugar UCD, y los sindicatos, de que el decreto no va a desmantelar Ensidesa, sino todo lo contrario».En los últimos días han sido elaborados varios informes técnicos para el presidente del Consejo Regional de Asturias, Rafael Fernández (PSOE), que coinciden en valorar el decreto como una grave amenaza para el futuro de Ensidesa, la mayor empresa siderúrgica integral del país, con el 70% de la producción y el 45% de todo el acero español.

Bayón justificó el decreto en la necesidad de reestructurar el sector siderúrgico con toda urgencia, tanto por su incidencia en otros sectores como porque sigue siendo considerado estratégico por el Gobierno. A corto plazo, el decreto se orienta a ajustar los costes para imprimir una mayor competitividad a los productos. A medio y largo plazo prevé la realización de las inversiones necesarias. Concretamente, en el período de diez meses una comisión coordinadora será la encargada de decidir la ubicación de dos nuevas acerías, y posiblemente de un tren de bandas en caliente. En medios políticos y sindicales asturianos se considera clave la persona que sea designada para ocupar la presidencia de dicha comisión. El PSOE y UCD apoyan la candidatura del asturiano Alfonso Alvarez de Miranda, ex ministro de Industria y ex presidente de Ensidesa, que ha sido implícitamente descartado por Ignacio Bayón, partidario de un presidente neutral desde el punto de vista de las presiones regionales.

De las palabras del ministro se desprende que una de las acerías será instalada en Avilés. Su criterio sobre el tren de bandas en caliente es, en cambio, mucho menos claro: «Si hoy hubiera que tomar una decisión», dijo, «sería partidario de prescindir de esta nueva unidad productiva para evitar tener que comernos las bandas en caliente. De todas formas, vamos a tomarnos un plazo de diez meses para seguir muy de cerca el desarrollo siderúrgico de Europa y decidir, en ese momento, lo más conveniente para la comunidad nacional».