El Madrid-Inter provocó una baja de la productividad en Italia

El partido Real Madrid-Inter, del miércoles, despertó tanto interés entre los aficionados italianos que el asunto ha tenido repercusiones graves en algunas fábricas, ante la ausencia masiva de los trabajadores para no perderse el partido, que fue televisado en directo para Italia.Precisamente en una jornada en la que todos los diarios del país daban a grandes títulos la hipótesis de un pacto social de los sindicatos con el Gobierno para frenar una inflación galopante que está llegando al 30%, amenazando incluso la misma democracia del país, como afirmó el líder sindical comunista de la CGIL, Luciano Lama, en la fábrica de Alfa Sud, de Nápoles, se produjo una pérdida en la producción de doscientos coches. Faltó al turno que correspondía a la hora del partido el 26% de los obreros. Y esto a pesar de que habían sído alertados y que aquel mismo día se había dado el anuncio de nueve despidos por absentismo. Se llegó así a la cifra de 65 despidos por este motivo, cosa poco menos que increíble, teniendo en cuenta que en Italia es prácticamente imposible despedir a nadie. Los sindicatos esta vez habían aceptado porque se había llegado a un 45% de absentismo en algunas ocasiones. Y una de estas ocasiones que los dirigentes de Alfa Sud ni los sindicatos consiguen controlar es, precisamente, el fútbol.

Ayer hasta fueron movilizados psicólogos y sociólogos para estudiar este fenómeno: «¿Cómo es posible», se preguntaban los dirigentes de la fábrica, «que haya trabajadores que se expongan a perder el puesto en un momento tan crítico cuando hay casi dos millones de parados y con tantas empresas en crisis? Y todo por un partido de fútbol». Los psicólogos han intentado explicar lo que dos horas de fútbol pueden significar de material proyectivo para estos trabajadores, a quienes se les dice todos los días que «tendrán que resignarse a ser cada vez más pobres» porque se han acabado los tiempos de las vacas gordas. Y ayer querían a toca costa que venciera el Inter, es decir, Italia; es decir, cada uno de ellos, decía un sociólogo. Para autoconvencerse de que el Inter debía ganar, hasta los periódicos decían que era justo incluso políticamente, ya que el Real Madrid era como la imagen del equipo de Franco. Un escritor comentó: "Hubiese sido menos retórico decir que necesitamos ganar porque todo a nuestro alrededor nos habla de derrotas y pesimismo».