Representantes de 54 municipios piden la unificación de las distintas policías bajo el mando de los alcaldes

La necesidad de que la Policía Municipal sea equiparada a los restantes cuerpos de seguridad del Estado, en una unificación a cuyo frente estén los alcaldes, es una de las primeras conclusiones obtenidas en las II Jornadas sobre Competencias Municipales en Materia de Seguridad Ciudadana, celebradas en Valladolid durante el pasado fin de semana y a las que han asistido 110 representantes de 54 municipios de más de 100.000 habitantes. En las conclusiones finales, hechas públicas el domingo, los participantes elaboraron un documento en el que se recogen siete puntos básicos del futuro estatuto de la Policía Municipal, que deberán ser negociados con el ministro del Interior, Juan Rosón, a fin de que, por medio de un decreto, sean puestos en práctica.

Estos puntos son relativos a la definición del cuerpo (carácter civil, estructura jerarquizada, y sus miembros, considerados agentes de la autoridad a todos los efectos), medios técnicos y operativos (las licencias de armas serán tramitadas por los ayuntamientos), régimen disciplinario, derechos sindicales (libertad de sindicación y derecho a huelga), incompatibilidades con otra profesión lucrativa, jubilación a los 55 años y acceso a los puestos de mando por oposición.La negociación de todos estos puntos correrá a cargo de los alcaldes socialistas de Barcelona, Madrid, Zaragoza, Sevilla, Hospitalet, Getafe, Gijón y Cartagena, más el de Sabadell (PCE) y Santa Cruz de Tenerife (UCD).

Según se puso de relieve durante las distintas ponencias, con la equiparación de las policías locales a las restantes fuerzas de seguridad del Estado se trata de conseguir una policía unificada y especializada encargada de hacer cumplir las normas de cada ciudad o comunidad autónoma y a cuyo frente esté el alcalde de la corporación municipal.

A juicio de los organizadores de las jornadas, la unificación de las policías evitará la creación de nuevos cuerpos policiales para las comunidades autónomas, ya que, como aseguró uno de los representantes de Madrid, el tercer teniente de alcalde, José Barrionuevo, a excepción de la comunidad vasca, en las restantes ciudades no existe ninguna tradición de policía específica y el cumplimiento de la normativa de cada ciudad puede ser resuelto perfectamente por las policías ya existentes una vez unificadas. «Se trata de crear un modelo válido para todo el Estado español, de forma que se reconozcan sus atribuciones, tanto a nivel central como autonómico o local».

Evitar nuevas cargas

El coste económico que traería consigo la creación de nuevos cuerpos de policía fue otro de los argumentos utilizados para pronunciarse a favor de los cuerpos ya existentes. Así, pusieron el ejemplo de Barcelona, donde aseguraron que cada ciudadano paga anualmente 4.500 pesetas para la Policía Nacional y 2.500 para la Municipal. La creación de un nuevo cuerpo supondría más carga económica y los organizadores coincidieron en que el momento no está para gastos especiales.Por todo ello, los asistentes aprobaron una ponencia elaborada por la mesa en que se propone la creación de juntas de Seguridad Local como organismo de unificación de las distintas policías. Así, la junta será una institución encargada de organizar en la práctica la coordinación de la seguridad ciudadana hasta el nivel de criminalidad. Esta junta será presidida por el alcalde de cada corporación, el concejal delegado de la Policía Municipal y por los mandos de los distintos cuerpos de la policía (jefe de la Policía Municipal, jefe de la Policía Nacional, comandante de puesto de la Guardia Civil y responsables de las policías autónomas).

Tanto en el acto de clausura de las jornadas como en la conferencia de Prensa celebrada el domingo, los organizadores se mostraron optimistas ante la actitud del ministro del Interior a la hora de asumir estas conclusiones, y, por tanto, la puesta en práctica de las mismas. El alcalde de Valladolid, el socialista Tomás Rodríguez, aseguró que en una reunión mantenida con Juan Rosón el 23 de julio, el ministro ya asumió las líneas fundamentales de las conclusiones de las jornadas. «Lo que hemos hecho aquí ha sido enriquecer esas líneas». Por tanto, estamos convencidos en que no habrá mayores dificultades para poner en marcha estos urgentes puntos». Sin embargo, Rafael Vera, director de la Policía Municipal de Madrid, manifestó su desconfianza al asegurar que «muy pocas cosas de las asumidas en esa reunión y en las I Jornadas celebradas en Cartagena se han llevado a la práctica».

José Guirao, representante de Cartagena, añadiría que los asistentes a las jornadas ostentan la representación de veinte millones de españoles, por lo que creía que las conclusiones tendrían que ser asumidas por el Gobierno. «Somos optimistas ante el tema porque creemos que se han producido ciertos avances respecto a nuestra situación en las primeras jornadas. Así, mientras que en Cartagena no hubo ninguna representación de la Administración, este año hemos contado con la presencia de Juan José Rosón en la inauguración, y aunque su discurso no contenía compromisos explícitos, de alguna manera manifestó estar de acuerdo con la necesidad de arbitrar una solución del tipo de la acordada por nosotros».

A lo largo de las distintas ponencias, la discriminación que sufre el agente municipal respecto a los integrantes de las distintas policías, fue puesta de relieve en numerosas ocasiones. El alcalde de Getafe, Jesús Prieto, llegó a asegurar que en muchas ciudades, hasta hace poco tiempo, la seguridad ciudadana nocturna ha corrido a cargo casi exclusivamente de los agentes municipales. Sus cometidos han tenido que ser de todo tipo, desde la colaboración en la extinción de un incendio hasta la ordenación del tráfico o la contención de la delincuencia juvenil, entre otras muchas cosas, constituyen el trabajo diario de estos agentes, pero la mayoría de las veces en calidad de subordinados de otros cuerpos.

Finalmente, y respecto al incidente producido al no poder asistir a una mesa redonda sobre la huelga policial, dos representantes de la Unión Sindical de Policía (USP), debido a la prohibición de la Dirección General de la Policía, los organizadores de las jornadas explicaron que no se pronunciarían hasta no tener más información sobre el tema, dado que durante la noche del sábado, dicha Dirección General hizo público un comunicado en el que desmiente tal prohibición. Un portavoz de la USP, José Luis López Esteban, aseguró ayer a EL PAIS que 48 horas antes de que se celebrara el acto solicitaron permiso por escrito a sus superiores para desplazarse a Valladolid. La única respuesta la recibieron de forma verbal a través de una de las secretarias, quien les comunicó que no se les autorizaba para desplazarse a Valladolid.