Próxima integración del Rural y Mediterráneo en el Banco Exterior
El Banco Rural y Mediterráneo podría integrarse definitivamente en el Banco Exterior, mediante una operación de fusión por absorción, después de que se celebre la junta general de accionistas del primero, el próximo sábado 11 de abril. En este acto se aprobará una reducción del 50% en el capital del Rural para sanear pérdidas acumuladas, a la que seguirá una ampliación al 200%, que aportará a los fondos propios de esta entidad unos 3.500 millones de pesetas (véase EL PAÍS de 21-3-1981).
El Estado, a través de la Dirección General del Patrimonio y de la Asociación Institucional de Servicios Socioprofesionales (AISS), mantiene la titularidad de más de un 90% de las acciones del Banco Rural. Esta es, aproximadamente, la participación que adquirirá el Exterior, quien pagará mediante la entrega de acciones de otras compañías que tenga en su cartera de valores.En un principio, se especuló con que el pago al Estado lo realizara el Banco Exterior, en acciones propias que mantuviese en su autocartera. No obstante, medios del sector han puesto reiteradamente en duda que el Exterior cuente con un número de acciones propias lo suficientemente importante como para hacer frente al pago de esta operación, que, según algunas opiniones, se realizaría a la par.
Contrapartida con títulos de monopolios
Entonces la contrapartida a ofrecer por el Exterior sería lógicamente acciones de otras compañías, y aquí se señala que en su cartera figuran paquetes importantes de títulos de alguno de los monopolios estatales.Por otra parte, el diario 5 Días apuntó ayer la posibilidad de que la ayuda que el Banco de España aportase al Exterior para realizar la operación de compra del Rural podría establecerse en torno a los 8.000 millones de pesetas, a un tipo de interés referido al básico del banco emisor (en torno al 8%), con la amortización a los seis años sin ninguno de carencia.
El Banco Rural presentará unas pérdidas afloradas en el ejercicio de 1980 de unos 3.400 millones. Para cubrirlos destinará los 750 millones de la reducción de capital, los 1.400 millones de sus reservas aplicables y una parte de los recursos que obtenga con la ampliación de capital, que será íntegramente suscrita por el patrimonio del Estado.
Esta solución de la fusión por absorción del Rural y el Banco Exterior ha tenido una fuerte contestación desde dentro de la primera entidad, ya que se pretendía la supervivencia del Rural por separado del banco comprador. No obstante, parece que se impondrán los criterios de rentabilidad, y la fusión de las dos entidades será una realidad en fecha próxima, con lo que se consolidará la posición del Exterior, un banco participado mayoritariamente por caudales públicos, en el sector de bancos comerciales.
