Flojearon los bancos
Ha empezado la semana en las bolsas con unas sesiones irregulares que tuvieron la virtud de hacer malos casi todos los pronósticos que se habían adelantado. Los bancos, a pesar de que iniciaron su actividad con una cierta pujanza, se vieron a última hora sometidos a unas presiones vendedoras, cuyo origen resultaba difícil de determinar. Por el contrario, cuando casi todos los especialistas apostaban por que se produjesen nuevos recortes en los precios de las eléctricas, la oferta cedió un tanto y los cambios, a pesar de que registraron algunas bajas, pasaron la prueba que suponía la sesión de ayer con bastante dignidad. Las declaraciones que el lunes realizó el presidente del Gobierno durante su visita a la central de Almaraz, en apoyo de los proyectos nucleares y negando la posibilidad de que se celebre un referéndum al respecto, parecen haber devuelto algo de la perdida confianza. El Banco Popular, cuya ampliación de capital finalizaba ayer, centró la atención de numerosos asistentes a las reuniones. Los cupones en el mercado madrileño se pagaron a 165 pesetas, lo que supone un precio para las acciones suscritas del 330%. Las acciones viejas se cotizaron al 334%, y los nuevos títulos serán admitidos a cotización hoy mismo, equiparados a los antiguos al no presentar diferencias de derechos económicos. Esta sería la primera ocasión en la historia reciente de las bolsas españolas en la que unas acciones nuevas fuesen admitidas a cotización oficial equiparadas a las viejas el día siguiente de finalizar la ampliación.
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