Chopera: "Las Ventas ha sido el sueño de toda mi vida"

Manolo Chopera ha hecho realidad el sueño de toda su vida: ser empresario de la plaza de Las Ventas. La afición de Madrid ha empezado a hacer realidad también lo que siempre pareció un sueño, en toda la historia del toreo: que un empresario se viera obligado, por las condiciones del arrendamiento de la plaza, a hacer una promoción en profundidad de la fiesta de los toros.

La sórdida y compleja transición de la.disparatada subasta de 1978 al concurso progresista de 1981 ha dado como resultado que acceda a Las Ventas uno de los empresarios taurinos con más prestigio y experiencia de las últimas décadas. La nominación de Manolo Chopera, que ha despertado gran expectación entre los aficionados madrileños, tampoco fue fácil, pues su, oferta hubo de competir con otras, calificadas en la propia Diputación de Madrid como de muy importante contenido.

Pregunta. ¿Cómo ha sido su primer día de empresario de Madrid?

Respuesta. Muy laborioso, pero a la vez tranquilo. Las emociones no son tan fuertes como uno suponía, cuando vivía la incertidumbre del resultado del concurso.

P. ¿Su llegada a Ia empresa de Madrid es lo más importante que le ha ocurrido en sus cerca de cuarenta años de empresario?

R. Desde luego ha.sido el sueño de toda mi vida. Las Ventas es la capital del mundo taurino y era la más alta meta a conseguir. Ha merecido la pena esta larga espera.

P. En el concurso se han valorado especialmente los proyectos de promoción del espectáculo. ¿Cuáles son los que principalmente acometerá la nueva empresa?

R. En cuanto al toreo, nos centramos muy especialmente en la ayuda a la Escuela de Tauromaquia y a los novilleros, y nos esforzaremos en mejorar la calidad de las sucesivas temporadas. En cuanto a planes de difusión, información y servicio al público, vamos a ser innovadores. Entendernos que hay mucho por hacer en este capítulo y probaremos las fórmulas que sean necesarias, hasta encontrar la más adecuada. Facilitaremos al máximo la adquisición de boletos, con utilización del pago fraccionado, implantación de abonos por temporada, apertura de una cuenta para la venta anticipada de abonos, en distintos bancos, donde los espectadores podrán ingresar las cantidades que estimen convenientes en las fechas que les sean más cómodas. Tendremos un servicio telefónico permanente de información al público. Editaremos un programa oficial de dieciséis páginas que llevará toda la información necesaria sobre cada corrida, con biografías de los toreros actuantes y hasta el color de los trajes que vestirá cada subalterno, para su más fácil identificación. Estudiamos la instalación en la plaza de dos pantallas gigantes de televisión, para información inmediata al público, repetición de las secuencias más interesantes de la lidia a la muerte de cada toro, exhibición de las reses que se lidiarán en festejos sucesivos, etcétera. El único problema de esta innovación es adecuarla convenientemente al entorno arquitectónico del edificio, pero creo que lo resolveremos bien. También tenemos pendiente negociar con los directivos del Ente Público RTVE el intercambio de información. Y por lo que se refiere a la publicidad de los espectáculos, la incrementaremos tanto en número y frecuencia, como en la imagen de los anuncios.

P. Ha ofrecido usted un mínimo de 66 festejos. ¿No habrá problema para cumplir este compromiso?

R. No lo habrá, y aún pueden ser más, lo cual, dependerá del desarrollo de la temporada. Este año, vamos, a empezar el 29 de marzo y hasta el 10 de mayo, en que empezará la feria de San Isidro, daremos alrededor de dos o tres corridas de toros y unas cuatro novilladas. Junio será un mes de gran actividad taurina en Las Ventas, y a caballo entre junio y julio, organizaremos, con el rango que se merece, las corridas del cincuentenario de la plaza. El número de festejos de agosto será consecuencia de cómo hayan respondido hasta entonces público y toreros. En septiembre tendremos feria y los festejos de días festivos con alguno en fecha laborable, y con ellos seguiremos hasta prácticamente finales de octubre. Es un calendario muy apretado y, como le decía, aún puede serlo más.

P. ¿Las figuras sólo vendrán para San lsidro, como siempre ocurre?

R. Emplearemos incentivos para que actúen más veces en Madrid, y por supuesto también en la feria de septiembre.

P. ¿Cómo va a ser el toro que salga al ruedo de Las Ventas?

R. Integro, por encima de todo, y con el trapío adecuado al tipo propio de su divisa. Los ganaderos tienen que responsabilizarse al máximo de estas exigencias.

P. ¿Y la cuadra de caballos de picar?

R. Bueno, ya sabe usted que yo tengo mi propia cuadra. Pero aún he de hablar con los actuales contratistas para tomar una decisión. Estoy de acuerdo en que en el caballo de picar y en los petos está la clave del normal desarrollo de la lidia. No es fácil este tema, pues público y ganaderos, por un lado, y picadores y contratistas, por otro, presionan mucho; aunque, naturalmente, encontraremos la solución adecuada.

P. ¿Se va a respetar la andanada del 8?

R. Es una cuestión a resolver en la Diputación, pues la anterior empresa la vendió casi toda para espectadores de la tercera edad. Mi intención es respetar esta andanada para quienes han sido sus habituales ocupantes.

P. ¿Ve usted. con optimismo el futuro de la fiesta?

R. El presente, desde luego, no es bueno. Han confluido muchos factores para llegar a esta crisis que actualmente padecemos, y que se aprecia en todos sus estamentos. Pero no soy pesimista, pues en tal caso no hubiera ni siquiera intentado ser empresario de Las Ventas. Opino, que, con la adecuada promoción -que hasta ahora no se ha hecho nunca-puede resurgir la fiesta en Madrid, y si resurge aquí, sus efectos se sentirán en toda España, por la condición indiscutible de capitalidad del mundo taurino que tiene Las Ventas. Ya sé que la tarea es muy difícil y que constituye un verdadero reto, pero lo hemos asumido con todas sus consecuencias.