La CEOE se manifiesta en contra de un Gobierno de coalición

El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Carlos Ferrer Salat, se mostró ayer contrario a la formación de un Gobierno de coalición en tomo a UCD y PSOE. «La consolidación y profundización de la democracia, que es un objetivo básico para los empresarios, no se consigue», según declaró ayer en conferencia de Prensa el presidente de la patronal cúpula, «con manifestaciones ni con coaliciones, sino afrontando los problemas esenciales del país e intentando resolverlos. Una coalición UCD-PSOE», añadió Ferrer, en nombre de los empresarios españoles, «no facilitaría precisamente la resolución de estos problemas que tiene planteados el país. Por el contrario, con un Gobierno de coalición nos quedaríamos sin alternativa válida para las próximas elecciones generales».

El presidente de la CEOE -«única institución que representa al conjunto del empresariado español»- compareció ayer ante los periodistas para «aclarar su posición en la actual situación política y ante las eventuales coaliciones de que se habla en estos momentos». Ferrer Salat insistió claramente en que «los empresarios apoyan el funcionamiento normal de la democracia que establece la alternancia en el poder según el resultado de las urnas, Por este juego democrático, unos partidos deben estar en el poder y otros en la oposición, y lo importante es que tanto el Gobierno como la oposición cumplan con su papel».«La mejor forma de consolidar la democracia es para Ferrer mediante una acción eficaz de Gobierno, cumpliendo lo programado, sin temor a cometer equivocaciones, y el país lo que reclama en estos momentos es acción y decisiones. La oposición debe cumplir igualmente el papel que tiene asignado y favorecer la concertación entre todas las fuerzas políticas en tomo a los grandes temas de Estado.

El presidente de la CEOE reconoció la necesidad de un cierto acuerdo entre todas las fuerzas políticas sobre la definición del Estado de las autonomías hacia el que nos dirigimos. Los otros tres grandes problemas que tiene planteados el país no precisan -según la CEOE- de ningún Gobierno de coalición para su resolución. En cuanto al terrorismo, orden público y seguridad ciudadana, Ferrer Salat indicó que «no es necesario un acuerdo, sobre este tema, ya que el Gobierno puede tomar por sí solo las medidas pertinentes». En lo que se refiere a la política económica destacó la falta de coincidencia entre el programa económico presentado por Calvo Sotelo en el discurso de investidura y el del partido socialista. Señaló grandes diferencias entre UCD y PSOE en torno, por ejemplo, al papel del sector público y al incremento de su déficit. En cuanto a la política exterior, «tampoco cabe duda», según Ferrer Salat, «de que las posiciones son contrarias entre ambos partidos políticos».

«Por otra parte», insistió en repetidas ocasiones el presidente de la CEOE, «si el PSOE accede al Gobierno por la vía electoral, los empresarios aceptaremos sin ninguna clase de reparos el Gobierno socialista, porque respetamos las reglas democráticas, aunque, naturalmente, criticaremos su política económica siempre que no estemos de acuerdo con ella, tal como hemos hecho otras veces con la de UCD».

«El empresariado considera que el golpe de Estado del pasado 23 de febrero es un atentado muy grave contra la Constitución, pero también entiende que el síndrome Tejero que se ha producido para unir a todos en un mismo Gobierno que defienda la democracia no es la terapéutica adecuada, a menos que UCD no tuviera mayoría en el Parlamento», dijo Ferrer.

La CEOE desea que el Gobierno pueda hacer frente a los graves problemas planteados y manifiesta su esperanza en que el programa de Calvo Sotelo sirva para resolverlos. «Incrementar el número de familias políticas dentro del Gobierno no facilitaría la resolución de los problemas, y por ello», insistió, «no se fortalece la democracia con un Gobierno de coalición».

El presidente de la patronal pidió «un poco de tranquilidad para el Gobierno recién constituido y no debilitar su acción con un clima de inestabilidad y angustia, que se crea al hablar ya de hacer otro Gobierno».

Ferrer Salat señaló que la junta directiva de la CEOE ha ratificado el acuerdo del Comité Ejecutivo en defensa de la democracia, del pasado 24 de febrero, y afirmó que no ha detectado ninguna reserva sobre ello por parte de las organizaciones empresariales confederadas. Se mostró absolutamente contrario al establecimiento de un pacto similar al de la Moncloa, y manifestó que no creía que existiera en estos momentos ninguna democracia tutelada.

El presidente de la CEOE calificó de gran prioridad el mantenimiento de la concertación social conseguida en estos últimos años, ya que este diálogo existente entre empresarios y trabajadores da una gran estabilidad al país y es, sin duda, el logro más positivo de la sociedad española en el último siglo y medio. Ferrer Salat afirmó que «la inexistencia de esta concertación social, de este diálogo, fue uno de los factores que desencadenaron la guerra civil española».

«El pretendido golpe de Estado no beneficiaría en modo alguno a la economía española, ya que la aspiración de España debe ser el modelo europeo, y el modelo europeo es la democracia», dijo Ferrer. «Además», señaló, «la burguesía empresarial es la que ha inventado la democracia y la que ha traído las libertades al mundo occidental»

Ferrer Salat negó que la CEOE hubiera tenido contacto alguno con el general Armada, y José Antonio Segurado, de la ejecutiva afirmó que «CEOE nunca ha jugado ni va a jugar una opción De Gaulle, que parece que algún partido político ha jugado».