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El Banco de Bilbao renunció a comprar un importante banco inglés

Andrés Ortega

El Banco de Bilbao abandonó un intento de adquirir el 49% del Grindlays Bank, en posesión del Citibank, al no llegar a un acuerdo con Lloyds Bank, que controlaba el resto de las acciones hace unos cuatro meses.Lloyds posee el 41% de Grindlays Holdings, una compañía que a su vez era propietaria del 51% del Grindlays Bank, según informaba ayer en The Financial Times, y han confirmado diversas fuentes a EL PAIS, entre ellas el director del Banco de Bilbao en Londres, O. Santamaría.

Solvencia internacional

Esta operación recordaba en cierto modo a la compra del Banco de Valladolid por el Barclays Bank. El Banco de Bilbao tiene la fama entre los medios financieros de la City, de Londres, de ser uno de los bancos españoles de envergadura con una mayor proyección internacional y especialmente europea. El Banco de Bilbao comenzó a interesarse por adquirir este 41% de las acciones del Grindlays el verano pasado, por lo que se acercó al Citibank, que hace más de un año había mostrado interés en dejar de ser un accionista minoritario del Grindlays, vendiendo su participación o comprando la de Lloyds, pero al no llegarse a un acuerdo sobre el precio de las acciones a comprar, el Citibank quiso

Operación importante

La operación que intentó el Banco de Bilbao era importante, ya que Grindlays tiene sucursales en países como la India y Srilanka (Ceilán) e intereses en el euromercado monetario. Antes de realizar una oferta al Citibank, el Banco de Bilbao solicitó una auditoría del Grindlays a la empresa Arthur Andersen, que resultó muy positiva en opinión del banco español, tras lo cual se entablaron negociaciones con el Citibank. La sucursal del Banco de Bilbao en Londres se inhibió de las conversaciones que fueron llevadas por directivos de la central del banco español. Sólo se llegaron a manejar porcentajes y nunca cifras concretas. El Banco de Bilbao no llegó a un acuerdo con Lloyds sobre el futuro de Grindlays, y decidió retirarse de la operación. Todo indica que Lloyds no estaba interesado en perder el control del Grindlays, e incluso se habla de que Lloyds está negociando para conseguir un control completo sobre el banco en cuestión, aunque ninguna de las partes interesadas quería comentar sobre este asunto. Grindlays tenía un capital de sesenta millones de libras (12.000 millones de pesetas) en diciembre de 1979, con 21,8 millones de dólares en obligaciones y 75 millones de dólares en préstamos subordinados. Las cuentas en depósitos llegaban a los 3.194,5 millones de libras.

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