José Luis Balbín: "Hacia una programación especial de calidad"
La producción y emisión a corto plazo de programas experimentados con éxito en otras televisiones desarrolladas y que en Televisión Española están inéditos o mal adaptados, es uno de los objetivos prioritarios de José Luis Balbin, director de Programas Especiales de Televisión.
José Luis Balbín fue, hace cinco meses, víctima de las represalias del anterior equipo directivo -con Fernando Arias-Salgado como director general de RTVE y con Luis Ezcurra como director en funciones de Televisión Española-, que no consintió la emisión en directo del espacio La clave, que él había adaptado de la televislón francesa.José Luis Balbín esahora uno de los máximos cargos; de RTVE y forma parte del reducido consejo de alta dirección del nuevo Ente Público RTVE. Sólo tres directivos con competencia directa en la programación de Televisión Española son miembros de aquel Consejo: Miguel Angel Toledano, director de Televisión Española; José Ignacio Gabilondo, director de los Informativos, y José Luis Balbín.
El primer bloque de programas, denominados, coá excesivo simplismo y ambigüedad, «especiales», estaría pronto para emitirse a primeros de abril, fecha en que se espera de un vuelco la actual programación, condicionada, entre otras causas, por el esquema de tres telediarios al día ( que se transformarían en uno más amplio, a emitir al inicio de la noche) y por los Grandes relatos nocturnos, que pasarían a la sobremesa en el tradicional horario de las telenovelas.
Entre estos programas especiales, de una primera e inmediata producción, José Luis Balbín menciona, aunque los títulos sean por ahora sólo indicativos, dos informes o estudios en profundidad sobre los temas nacionales e internacionales más importantes de la semana; un Cara a cara, con dos antagonistas moderados por un periodista; un Cara a dos, en el que un personaje (un político, por regla general) debatirá una noticia con periodistas de medios y países distintos que hayan protagonizado los hechos desde diferentes posiciones; un programa biográfico que probablemente será una «síntesis» de Esta es su vida, A fondo, Quién es y similares; un programa de humor; un programa de consumo; un espacio que podría titularse El programa, y que consistirá en media hora semanal de improvisación o montaje actualizado sobre la noticia que surja en cualquier momento; un programa sobre defensa y las Fuerzas Armadas; un espacio de sociología musical, que ha sido encargado a Carlos Tena; un espacio bajo título posible de Nos rectifican, para que los telespectadores ejerzan el derecho de réplica y rectificación, y, por último, el retorno de La clave (los viernes por la noche y por la segunda cadena) y de la serie Raíces, que seguirá dirigiendo Manuel Garrido Palacios, cuyos reportajes costumbristas se ampliarán a otros países.
Todos estos programas tendrán periodicidad semanal y una duración que oscila entre treinta y sesenta minutos. Exceptuados los nombres de Carlos Tena, de Luis Pancorbo, para el informe internacional, y de Garrido Palacios, para Raíces, José Luis BaIbín no tiene decididos los responsables de cada programa. Entre los periodistas que le han presentado proyectos de programas y entre los profesionales con los que en principio ha establecido conversaciones figuran, además de los citados, Enrique Meneses, Ladislao Azcona, Manuel Martín Ferrand, Alfredo Amestoy, Joaquín María Pujal (responsable del programa catalán Vosté pregunta), Antoni Serra (director del programa catalán Giravolt), Alfonso Díez (reportero de Radio Nacional), Manuel Torre Iglesias (antiguo director de Escuela de salud) y Francisco García Novell (antiguo director de La setmana), que podría dirigir un informativo juvenil e infantil.
El director de Programas Especiales tiene previsto, a plazo medio, iniciar una segunda fase de producciones documentales, con las que «Televisión Española arbitrará una forma de ayuda al cine español y proporcionará un fuerte impulso a la calidad de la programación», según explicó a EL PAIS.
Un tercer bloque de programas, a largo plazo, previstos por José Luis BaIbín, versará sobre la producción y coproducción originales de productos de calidad en todos los géneros de programas, incluidos largometrajes.
La programación del primer bloque podría comenzar a emitirse en abril o retrasarse un mes si las demás áreas no llegan a tiempo para producir programas de acuerdo con los nuevos esquemas de emisiones. Estos programas especiales, según BaIbín, tendrán carácter provisional y su continuidad estará condicionada a la calidad de los mismos. Sólo dos de los informativos no diarios que se emiten actualmente pasarán al departamento de especiales: Vivir cada día, que se emitirá al final de la tarde, y Más vale prevenir.
José Luis BaIbín contará con una estructura mínima de cargos en su departamento para llevar a cabo la planificación y producción de los programas. Su equipo, aunque los nombramientos no son firmes todavía, estará integrado por Enrique Vázquez (procedente de la agencia Efe) como coordinador; Julio Vargas Robles (que procede de la delegación de Televisión Española en París) como jefe de medios tanto técnicos como humanos; Alfonso Cortés Cavanillas (trabajador de RTVE) para la jefatura de la planificación de la producción, y José Salvador (administrativo de RTVE) para la jefatura de control del gasto, encargada de que se cumplan los objetivos y presupuestos de la planificación de la producción.
«La dirección de programas especiales es nueva y, por tanto, hay que crearla», afirma José Luis BaIbín, «y estamos preocupados en los distintos niveles de dirección por dotar de organigrama a los departamentos creados antes que iniciar la producción de nuevos programas, ya que la actual estructura crea graves tensiones. La casa está muy burocratizada y, aunque se esté eliminando riesgos, se corre el peligro de que siga burocratizada. Yo soy partidario de una estructura piramidal y directa donde las responsabilidades estén muy claras. Nuestros programas no serán nada excepcional. Me conformo con elevar la calidad tanto de los informativos como de los culturales y programas frívolos que de mí dependan. Para cambiar la televisión en profundidad se necesita mucho tiempo, pero creo que la programación funcionará mejor, entre otras razones porque no me parece fácil dejarla tan mal como estaba».
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