Protestas por la reducción de plantilla de Portinox (Granada)

El expediente presentado por la dirección de la empresa Portinox para la reestructuración de su plantilla en dos turnos de seis meses ha originado en Granada una extensa campaña de protesta en medios laborales, políticos y universitarios de la ciudad, con manifestaciones, mítines y otros actos convocados por CC OO y UGT, en los que han participado varios miles de personas a lo largo de las dos últimas semanas.Se trata de la factoría más importante del sector siderometalúrgico de la provincia granadina, así como la de mayor número de trabajadores. Los problemas actuales de Portinox comenzaron hace cinco años, con la compra de la fábrica por el grupo de empresas de la multinacional MISA, propietaria de Teka y otras empresas del ramo distribuidas por Alemania, Portugal y España, aparte de una cadena de hoteles en la Costa del Sol y grandes extensiones agrícolas en América Latina.

En la actualidad, según una denuncia realizada por el comité de empresa de la fábrica, la dirección de Portinox rechaza sistemáticamente los pedidos que formulan clientes habituales de la empresa granadina y sólo acepta encargos para Teka, a la que se manufacturan los productos sin marca y a precios por debajo del coste, para luego ser vendidos por ésta con su marca a precios muchos más altos.

Empresa no rentable

Las causas expuestas por la dirección de Portinox ante la Delegación Provincial de Trabajo para sacar adelante el expediente de regulación de plantilla son únicamente de tipo estructural, argumentando la no rentabilidad de la empresa y no ofreciendo para los trabajadores más salida que la de¡. desempleo. Estos, por su parte, han ofrecido a la empresa la posibilidad de comprar la fábrica, lo que no ha sido aceptado.Mientras tanto, un escrito con más de 3.000 firmas de apoyo al comité de empresa de Portinox -entre ellas, las de¡ presidente del Consejo de Estado, Antonio Jiménez Blanco, y otros parlamentarios de UCD, PSOE de Andalucía y PCA-PCE- ha sido entregado al delegado de Trabajo, Fernando Aguirre, para que «arbitre las medidas oportunas que impidan que estos trabajadores pasen a engrosar el elevado número de parados de la provincia».