800 millones de pesetas en pérdidas al incendiarse una fábrica de papel
En ochocientos millones de pesetas se calculan las pérdidas producidas en la papelera Inpacsa, situada en Balaguer (Lérida), a raíz del incendio que el pasado miércoles destruyó una gran parte de sus instalaciones.
La citada industria produce trescientas toneladas diarias de papel industrial para embalajes. Se trata de una de las primeras industrias del sector en Cataluña. El accionista mayoritario de la empresa es el ex alcalde franquista de Barcelona José María de Porcioles.
Las instalaciones de Inpacsa están valoradas en 9.000 millones de pesetas. El fuego afectó a las zonas de almacenaje de papel y a una parte de las instalaciones eléctricas. Se desconocen las causas, si bien la dirección de la empresa cree que el siniestro fue debido a un cortocircuito.
Inicialmente existió la creencia general de que el fuego habría podido ser provocado, debido a quese observaron dos puntos de fuego simultáneos. Esta posibilidad fue desmentida por dirigentes de la empresa y por el alcalde de la ciudad de Balaguer, quien basaba sus impresiones en un informe de los técnicos municipales.
Inpacsa tiene una plantilla de cuatrocientos trabajadores. Su actividad ha sido contestada desde varios sectores, que la hacen responsable del vertido incontrolado y la consiguiente contaminación de las aguas del río Segre. Con anterioridad a la instalación de depuradoras, la Comisaría de Aguas del Ebro había multado en varias ocasiones a la empresa por dicha causa.
El presidente de Inpacsa, Jordi Mercadé, declaró que, «tras el incendio de nuestra factoría en Balaguer, los puestos de trabajo no peligran. Esta mañana (por ayer), el personal se ha incorporado a sus turnos normales, si bien la tarea principal ahora es el desescombro y la limpieza de las naves que han sido afectadas por el fuego».
