El Gobierno italiano no acepta el chantaje de las Brigadas Rojas
El Gobierno italiano rechazó ayer el chantaje que pretenden ejercer las Brigadas Rojas, y anunció que «los siniestros procedimientos propuestos por los terroristas no tienen posibilidad alguna de ser aceptados». En su octavo comunicado, los brigadistas anunciaron el domingo la «condena a muerte» del magistrado Giovanni d'Urso, dejando la decisión de «ejecutar o aplazar la sentencia» en manos de los detenidos de extrema izquierda de las cárceles de Trani y Palmi.El Estado ha escogido la vía de la firmeza ante la campaña terrorista desencadenada en el país hace tres semanas: secuestro del magistrado romano el pasado 12 de diciembre; motín en la cárcel de Trani, con toma de rehenes, el 27 del mismo mes, y asesinato del general Calvallgi el día de fin de año.
El ministro de Justicia, Adolfo Sarti, confirmó ayer en el Parlamento que el Gobierno «hace todo lo que puede para salvar la vida del magistrado», al tiempo que advertía que la violencia de las «bandas terroristas» hace un uso «profesional» de los medios de comunicación y busca destruir la estructura judicial del país. El Gobierno ha presentado un proyecto de ley que recorta el derecho de información, «para que éste no desemboque en la instigación al terrorismo o en su apología».
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