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Diciembre ha sido el mes más seco del siglo en Madrid

El mes de diciembre que hoy termina ha sido, con mucho, el más seco del siglo en la capital de España y en muchos otros puntos de la vertiente atlántica.A falta de los datos de hoy, y siendo extremadamente probable que no llueva nada, vista la situación anticiclónica de los mapas del tiempo previstos para hoy en nuestro país, la precipitación total registrada por el Instituto Nacional de Meteorología en los treinta días transcurridos del presente mes alcanza la cifra, realmente exigua, de 0,7 milímetros (o litros por metro cuadrado) de lluvia.

Esta cantidad es la más baja nunca registrada en diciembre. El anterior récord de sequía lo tenía el mes de diciembre de 1912, con 1,4 milímetros, exactamente el doble que este año, lo que prueba bien claramente lo extremadamente anormal del clima en la capital de España en el último mes del año.

El mes de enero del año que ahora termina fue igualmente un mes muy seco, y sumando la precipitación registrada en dicho mes de enero y la del mes de diciembre, normalmente los dos meses más fríos del año, se alcanza la cantidad de nueve milímetros, sólo superada en igual período (enero más diciembre del mismo año) por el año 1954, en que ambos meses totalizaron sólo ocho milímetros.

Sin embargo, el año 1980 no ha sido el más seco del siglo, ya que llovió bastante en primavera y algo en otoño. El año 1980 hace el número dieciséis de la clasificación de los más secos del siglo en Madrid.

La circunstancia de haber sido los meses más fríos de 1980, enero y diciembre, también los más secos, suele tener consecuencias muy negativas, especialmente de cara a la salud y a la contaminación. El tiempo seco y frío favorece la aparición de enfermedades invernales y de gripes y problemas respiratorios, y, por otra parte, un tiempo de estas caraterísticas facilita la acumulación de los contaminantes, sin el alivio importante que suponen las lluvias, y el tiempo inestable que suele acompañarlas.

Hay que destacar que Madrid y buena parte de la vertiente atlántica), donde se han batido todos los récords de sequía este año en diciembre, estaba dentro de la zona para la que las predicciones a largo plazo que realiza el Centro Mundial Meteorológico de Washington anunciaban precipitaciones entre normales y superiores a las normales, lo que en Madrid hubiera significado lluvias de por lo menos cincuenta milímetros.

No es la primera vez este año que Madrid escapa, de forma flagrante., a lo previsto por los americanos con un mes de anticipación; recordemos que agosto resultó uno de los más calurosos del siglo, a pesar de que se pronosticó un mes antes, que iba a tener temperaturas por debajo de lo normal.

De todos modos, estas predicciones a largo plazo, siempre para grandes áreas y en promedios muy generales, suelen ajustarse bastante a la realidad, a pesar de sus fallos con Madrid.

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