Se estudia la creación de una gran empresa eléctrica en el noroeste de España

La compra de Compañía Eléctrica de Langreo (CEL) por Hidroeléctrica Española (Hidrola), sociedad participada de los bancos Urquijo y Banesto, podría ser el primer paso hacia la consolidación de una gran empresa eléctrica del Noroeste y parte del norte de España. De ella formarían parte, además de FENOSA (sociedad de la que es consejero José María Oriol, presidente de Hidrola): Hidroeléctrica del Cantábrico, que suministra el 70% del consumo asturiano, y Electra de Viesgo, que distribuye en Santander y Palencia.

Por lo pronto, Hidroeléctrica del Cantábrico está interesada en conseguir la fusión con Electra de Viesgo, pero ésta se resiste debido, posiblemente, al interés del Banco de Vizcaya e Iberduero en no perder influencia en la empresa resultante. Hidroeléctrica del Cantábrico intentó también la fusión con CEL.

Es significativo que Prudencio Fernández Pello, director general de Hidroeléctrica del Cantábrico y consejero de CEL, no fuera informado hasta última hora de la venta del paquete que Duro-Felguera tenía en esta sociedad a Hidrola. El Banco Herrero vendió todas sus acciones de CEL.

Medios empresariales asturianos no se explican las razones que aconsejaran a Duro-Felguera a desprenderse de su participación en CEL, por la que percibirá unos 2.000 millones de pesetas, en vísperas además de la negociación de un convenio colectivo, en el que pretende imponer la congelación salarial a sus trabajadores. La entrada de Hidrola en Asturias despertó cierta inquietud en Hidroeléctrica del Cantábrico, cuya dirección pretende impedir que extienda su distribución más allá de las empresas de Langreo que reciben el suministro de CEL y exigir el cumplimiento del contrato firmado por FENOSA, Electra de Viesgo, Sevillana e Hidroeléctrica del Cantábrico con CEL, según el cual, las cuatro primeras empresas tienen comprados hasta 1984 los excedentes de esta última.