Energía del sol para volar.
El primer avión movido exclusivamente por energía solar ha realizado ya diversas pruebas, aunque recorriendo distancias cortas y a poca altitud. Paul Macready, su inventor, piensa realizar en breve un vuelo de cien kilómetros, y más adelante piensa establecer una línea regular, con poca carga, entre París y Londres. El prototipo, llamado Solar Challenger, pesa sólo noventa kilos, y obtiene la energía que necesita su motor eléctrico de 15.000 células solares colocadas en las alas, de siete metros de envergadura, y en la cola. En la fotografía pueden apreciarse las características del avión, en uno de sus vuelos de prueba.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.