_
_
_
_

Más de 3.000 personas asistieron en Hendaya a los actos fúnebres de los dos asesinados por el BVE

Entre 3.000 y 4.000 personas participaron ayer en Hendaya en el funeral de cuerpo presente de Jean Pierre Haramendy y José Camio, asesinados el domingo en un bar de la localidad por un comando del Batallón Vasco Español, que hirió además a otras diez personas. A partir de las doce horas, secundando el llamamiento del consejo municipal de Hendaya y de las organizaciones sindicales, quedaron paralizadas todas las actividades y la villa se convirtió en una ciudad muerta durante el resto del día.Sin embargo, numerosos centros de enseñanza, talleres y comercios optaron por no abrir sus puertas desde por la mañana, adelantándose a la hora establecida por el Ayuntamiento -cuyos concejales pertenecen a una candidatura de unidad de la izquierda que integra a los partidos socialista y comunista, e independientes-, que había solicitado la paralización de la ciudad en señal de duelo desde el mediodía.

El funeral comenzó a las tres de la tarde, con la iglesia de San Vicente repleta de público. Centenares de personas tuvieron que permanecer en el exterior, bajo una fuerte tormenta que en algunos momentos descargó granizo. Se encontraban en el templo, además de los familiares de los dos fallecidos, el Ayuntamiento de Hendaya en pleno y varios alcaldes de localidades vasco-francesas. También asistieron dirigentes de Euskadiko Ezkerra. Junto a los féretros se situaron miembros de las asociaciones de excombatientes y antiguos legionarios, con sus banderas, en homenaje a José Camio, que combatió durante varios años en las filas de la legión extranjera.

Durante la ceremonia, que concelebraron tres sacerdotes en francés y eusquera, el párroco señaló en su homilía que el mandamiento no matarás es la base de cualquier civilización que pretenda inspirarse en los valores cristianos, y denunció a «quienes tienen la osadía de titularse guerrilleros de Cristo Rey o cosas parecidas y hacen de la violencia su principal instrumento». El sacerdote dijo que se hacía eco con sus palabras de un dolor que rebasa los límites de la población de Hendaya, provocado por lo que calificó de «drama absurdo» y «carnicería inexplicable».

Terminada la celebración religiosa, los féretros de Haramendy y Camio fueron introducidos en furgones, que se llenaron de coronas y ramos de flores. El primero recibió sepultura en el cementerio de Hendaya. En cambio, el cadáver de José Camio, nacido en Urbieta (Guipúzcoa), aunque nacionalizado francés, fue trasladado al cementerío de Hernani, por deseo de sus familiares.

A pesar de que grupos abertzales del norte del País Vasco habían anunciado una manifestación tras el funeral, ésta no llegó a celebrase.

La USP pide un esclarecimiento de los hechos

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Por su parte, la Unión Sindical de Policía (USP) ha solicitado el total esclarecimiento del incidente fronterizo del puente de Santiago, en Irún, y la rigurosa aplicación de la vigente ley de policías, en un comunicado hecho público ayer en Madrid, informa Efe.En relación con el incidente fronterizo, «la USP quiere dejar clara su posición de que se haga público lo sucedido, con determinación de sus responsables, pues la postura de silencio de las más altas instancias del Ministerio del Interior lesiona gravemente el prestigio de los cuerpos de policía».

«El suceso ha sido de tal índole», señala la nota, «que pudiera parecer que la policía es encubridora de unos asesinos, en el caso de que lo fueran, lo cual no estamos dispuestos a tolerar, por el bien de la imagen de la policía y respeto a la sociedad que sirve».

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_