CASA vendió 46 aviones C-212 Aviocar a una decena de países durante 1980
La Sociedad Construcciones Aeronáuticas, Sociedad Anónima (CASA), de la que es accionista mayoritario el Instituto Nacional de Industria, contrató en firme a lo largo del presente año ventas de 46 aviones del modelo C-212 Aviocar a una decena de países. Las ventas totales de la compañía durante el pasado ejercicio fueron de 11.386 millones de pesetas; el beneficio neto de la sociedad alcanzó los 125 millones de pesetas.
CASA ha colocado en el mercado civil la mayor parte de los aviones vendidos durante el presente año, 41 en total, de los cuales veinte son del programa de cooperación y colaboración con Indonesia, y en el mercado militar, cinco. Los países compradores del modelo de diseño español C-212 han sido Estados Unidos, Uruguay, Venezuela, Argentina, Indonesia, Kiribati, Gabón, Suiza y España.El mercado norteamericano se ha mostrado durante el último año como uno de los más dinámicos para el Aviocar. Siete de estos modelos operan en Estados Unidos en operaciones civiles del tercer nivel, comercializadas por cuatro compañías. El mercado suramericano es el último donde CASA ha lanzado una ofensiva de introducción de sus aviones, en concreto, en Argentina, Venezuela y Uruguay.
Indonesia, país con el que CASA mantiene un programa de cooperación y colaboración, ha adquirido una veintena de aviones, con lo que su flota de Aviocar ascenderá a 68 unidades, que son ensamblados por la empresa aeronáutica indonesia Nurtanio.
España, a través del Ministerio de Hacienda, ha adquirido un Aviocar para el servicio de Vigilancia Fiscal, que irá dotado de cámaras fotográficas y sistemas de detección, y entrará el próximo mes de febrero en servicio.
En la actualidad, CASA estudia, ante la demanda existente, la posibilidad de incrementar la producción del C-212 Aviocar, un avión turbohélice capaz de operar en campos poco preparados y adaptado para aterrizajes y despegues en corto. El Aviocar puede transportar 26 pasajeros o 2,7 toneladas de carga, con reducidos costes de mantenimiento, a una velocidad de crucero de 345 kilómetros por hora. La autonomía, en función de la carga, oscila entre los 390 y los 1.670 kilómetros. El total de unidades de este modelo vendidas a finales de 1979 ascendía a 133.
Las ventas totales de CASA durante el ejercicio de 1979, cerrado el pasado mes de mayo, ascendieron a 11.386 millones de pesetas, es decir, mil millones menos que en 1978. La cartera de pedidos, no obstante, se incrementó en 10.000 millones de pesetas.
Los gastos financieros de la sociedad ascendieron a algo más de mil millones de pesetas y su grado de endeudamiento rebasó los 6.500 millones, a medio y largo plazo, y los 10.200, a corto.
El beneficio neto de la sociedad, después de impuestos, se elevó a 125,2 millones de pesetas.
El capital social de CASA es de 1.120 millones de pesetas, distribuido entre el INI (69,5%), Northrop (13,3%), MBB (11%), otras compañías (1,1%) y los bancos Bilbao y Vizcaya, que se reparten el restante 5 % de las acciones.
La plantilla de CASA suma 8.027 trabajadores, repartidos entre las factorías de Sevilla, Cádiz y Madrid.
La producción de CASA se concentra en la actualidad en dos modelos de diseño español, el mencionado C-212 y el C-101, un reactor de entrenamiento militar básico y avanzado.
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