Programa europeo para la previsión de terremotos

Las ciencias de la Tierra, y en particular la sismología, se enfrentan con numerosas dificultades a la hora de medir con exactitud las deformaciones de la corteza terrestre. La geodesia espacial ha conocido un importante desarrollo en los últimos diez años, y ha proporcionado una exactitud en las medidas desconocida hasta la fecha. Así, por ejemplo, se ha podido medir, con un error máximo de diez centímetros, la distancia que separa las costas atlántica y pacífica de Estados Unidos, aproximadamente unos 4.000 kilómetros.Gracias a los satélites geodésicos se está avanzando a pasos de gigante en la medida de las dimensiones y en el estudio de la forma y el comportamiento del globo terrestre en su conjunto, así como de sus deformaciones internas y superficiales, la deriva de los continentes, las consecuencias de los terremotos, las variaciones en la velocidad de giro de la Tierra y el movimiento de los polos.

También es posible ya determinar con precisión el eje de rotación de la Tierra, cuyos desplazamientos,en un área de unos tres metros, pueden ya conocerse con una precisión de unos pocos centímetros. Algunas teorías recientes pretenden que estas variaciones del eje del planeta pudieran estar directamente relacionadas con los terremotos.

Estos avances en las medidas geodésicas, gracias a la utilización de satélites muy sofisticados, pueden suponer una inestimable ayuda para conocer mejor la sismicidad de nuestro planeta, e incluso para predecir, con un mayor margen de fiabilidad, las zonas en las que los terremotos son inminentes.

Precisamente en mayo de 1979 la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa adoptó la Recomendación 864 sobre la previsión de terremotos; en el pasado mes de septiembre, el Comité de Ministros creó lan comité de expertos para la investigación de los mecanismos sísmicos, la previsión de seísmos y la Iimitación de daños. Este comité comenzará sus trabajos el próximo día 2 de diciembre, en Estrasburgo.