Hoy se constituye el Consejo Nacional del PSC-PSOE en medio de fuertes tensiones

Hoy se constituye el consejo nacional del PSC-PSOE, cuando han transcurrido casi cuatro meses desde que se celebró su conflictivo segundo congreso. En este período de tiempo, y según reconocen sus propios dirigentes, el partido ha conseguido un espectacular descenso en cuanto a imagen pública, fruto de un constante deterioro político interno. Las críticas a Joan Reventós, primer secretario del partido, han adoptado ya el carácter de clamor y se centran en su incapacidad personal.

En los últimos días, tres miembros de la actual ejecutiva expresaron por separado a este diario, y con ruego de no ser citados, sus criterios sobre el socialismo catalán. Las fuentes coincidieron en el claro declinar de lo que en junio de 1977 fue la principal fuerza política de Cataluña («seríamos los que perderíamos más votos si hoy hubiese otras elecciones»). También coincidieron en la ausencia de caminos de salida de la crisis del partido en la responsabilidad personal de Reventós, en la ausencia de capacidad política por parte de éste, en la necesidad de un golpe de timón y en la imposibilidad de que, en fecha próxima, pueda convocarse un congreso extraordinario, con lo cual la crisis continuará.En cuanto a concreciones, las fuentes también coincidieron en señalar que «es imposible que Reventós continúe siendo el secretario general del partido y también el futuro candidato socialista a la presidencia de la Generalidad ».

Como sustituto de Reventós en la candidatura a la presidencia ole la Generalidad existe una cierta unanimidad respecto a Narcís Serra. Actualmente es el único socialista catalán que posee una imagen «institucional». En cambio, respecto a la sucesión al frente del partido, los criterios están mucho más repartidos. El único hombre que juega abiertamente a una alternativa radical a Reventós, en la jefatura del partido, es el diputado Ernest Lluch, que cuenta con el apoyo de la UGT catalana y de la dirección estatal del PSOE. Por un lado, posee una imagen socialdemócrata y catalanista y, por otro, ha cuidado mejor que nadie sus relaciones a nivel de Estado. Tanto Serra como él tienen como principales obstáculos el radicalismo verbal de la mayoría «obicilista» de la actual dirección.

Según las fuentes aludidas, Reventós es el gran secante que absorbe y neutraliza todo intento de replanteamiento. Una fuente manifestó, mientras golpeaba expresivamente la pared: «Es impenetrable por la voz humana, como el corcho».

Sólo una figura del socialismo catalán ha autorizado que se citara una de sus frases -la más moderada- sobre Reventós. Fue el catedrático de Estructura Económica, Santiago Roldán, quien afirmó: «Reventós es el Hamlet de la política catalana. Hasta ahora el socialismo catalán ha sido la víctima propiciatoria de sus dudas».

Una de las fuentes -una primera figura del socialismo catalán- responsabilizó personalmente a Reventós del increíble hecho de que los socialistas rechazaran el ofrecimiento, hecho por todos los partidos catalanes, de elegir un socialista como presidente del Parlamento catalán. La fuente afirmó textualmente que el rechazo fue impuesto por Reventós, quien «no quiso ser el presidente de la Cámara, por cuanto que perdía imagen como candidato a la sucesión de Jordi Pujol, ni tampoco quiso que la presidencia del Parlamento fuese para otro, ya que ello podría empañar su imagen de primera figura».