Como antes, pero en bicicleta

Una vez más, como en años anteriores, se va a celebrar en Madrid la denominada fiesta de la bicicleta, bajo los auspicios de las casas comerciales y multinacionales y con las bendiciones del ayuntamiento.Una vez más, la demagogia de la clase política afianzada en el ppder, utilizará al máximo su potencial de guerra (léase propaganda) piara convocar al ciudadano, para que, utilizándole, con el consentimiento que conlleva la inocencia, obtener un rendimiento político que ya quisieran para sí muchas empresas a nivel económico.

Y esto es lo más grave, es decir, la utilización que sufrimos los ciudadanos por parte del poder (aquí y en cualquier parte del mundo), cuando somos convocados por éstos para apoyar con nuestra masa unas accione s u opiniones, las cuales son posteriormente deformadas y empleadas, parla su beneficio.

No están lejos en el recuerdo esas manifestaciones que se producían en apoyo del anterior jefe de Estado, manifestaciones en las que no se regateaban esfuerzos propagandísticos, en las que todo era válido con tal que sirviese para justificar la existencia misma tanto del jefe como del Estado.

Somos muchos los que quisiéramos ver llegado el día en que la hipocresía quede relegada en el rincón del tiempo y se llegue a la comprensión clara y definitiva de que la sociedad humana tiene razón de existir, en tanto en cuanto sirva para repartir las penalidades que comportan una existencia individualizada.

Con todo esto, no se me ocurre nada mejor que decir al ciudadano lo que el año pasado se dijo erróneamente ala clase política: «La ecología no es cosa de un día»./