El Sindicato Profesional de Policías inicia una huelga de celo

Viene de primera página

Manuel Simón, dirigente de UGT, dijo a Efe que su organización « está en total desacuerdo con las manifestaciones hechas por los dirigentes del SPCSP, ya que no las consideran en absoluto democráticas».

Un portavoz del Sindicato Profesional indicó a este periódico que se habían enterado de la decisión de UGT a través de la radio y se lamentó de los problemas que ocasionó el cierre del local.

La asamblea se celebró en un, bar próximo a las dependencias policiales de la calle de Santa Engracia, donde se reunieron cerca de doscientos policías miembros del sindicato. Los asistentes expresaron su apoyo a la gestión llevada a cabo por la junta nacional, con tan sólo un voto en contra y siete abstenciones.

Al aludir a la situación en el País Vasco, los miembros del secretariado señalaron que «con las 37.000 pesetas de incentivos no se arregla el problema del terrorismo» y aludieron a unas declaraciones de Rosón respecto a que no existía ningún problema policial en el País Vasco, diciendo: «Que vaya Rosón allí y pregunte si ocurre algo».

Informaron de los contactos mantenidos con fuerzas políticas y centrales sindicales y anunciaron que se habían recibido apoyos de la Unión Internacional de Sindicatos de Policía y la llegada de observadores internacionales.

En relación con los contactos con partidos políticos y organizaciones sindicales (véase EL PAIS de ayer), un portavoz del sindicato dijo a este periódico que cuentan con el apoyo de Comisiones Obreras (CC OO) y de la Unión Sindical Obrera (USO). Esta última, al parecer. se ha ofrecido para que puedan celebrar asambleas en sus locales.

La Unión Sindical de Policía salió ayer de su silencio al difundir un largo comunicado en el que, entre otras cosas, «rechaza en absoluto las declaraciones políticas de los dirigentes del SPCSP, cuya irresponsabilidad e incoherencia quedan reflejadas una vez más al solicitar un referéndum en el País Vasco para saber si se está con ETA o con la policía».

Indica que «la sociedad española y muchos policías profesionales y demócratas están cansados de que los dirigentes de turno del Sindicato Profesional manipulen al colectivo policial», para añadir que «denunciamos que bajo el pretexto de solicitar un apoyo de los partidos políticos y centrales sindicales, lo que en verdad se pretende es obtener una legitimación política y social que difícilmente la conseguirían en unos cauces de normalidad, pues la legitimación pasa por que se acepte una filosofía sindical de la cual carece el SPCSP».

Tras señalar que «es inadmisible» que se califique de «juego» el actual sistema democrático, afirma que «están oscuras las motivaciones del SPCSP y pueden ser objeto de múltiples interpretaciones que van desde posibles intentos desestabilizadores hasta un distanciamiento calculado de la Administración».

Por lo que respecta a Barcelona, según informa nuestro corresponsal, Enric Canals, la USP ha decidido retirar el apoyo que inicialmente le prestó al SPCSP, alegando que no veía clara la trayectoria del sindicato y en particular la convocatoria de huelga de celo.