Obstáculos de los jueces polacos al sindicato independiente

Algunos miembros del Pacto de Varsovia se han referido con amenazas a la situación polaca en las últimas horas. Ayer, el secretario general del Partido Comunista checoslovaco, Gustav Husak, se refirió en Praga a «la injerencia extranjera en Polonia» con el propósito de «destruir la unidad de la comunidad socialista», añadiendo, a manera de consejo, que las cosas en Checoslovaquia mejoraron desde la invasión soviética en 1968.Por su parte, Erich Honecker, líder del Partido Comunista de Alemania del Este (PSUA), dijo el lunes, en ocasión del 31º aniversario de la fundación de la República Democrática Alemana (RDA) que la pertenencia polaca al campo socialista «no se puede cuestionar», y afirmó que la RDA «no permitirá la injerencia exterior en un país socialista hermano». En idénticos términos se expresó en un artículo que publicó en el periódico soviético Pravda, con motivo de la mencionada festividad.

La URSS se refirió ayer, en el órgano de sus sindicatos, Trud, a la existencia de «sindicatos independientes» en Polonia, pero subrayando el peligro de tal movimiento «por la demagogia y las tentativas de las fuerzas antisocialistas para influir en él».

Por otra parte, las divergencias persisten entre las autoridades polacas y el sindicato independiente Solidaridad, un día después de la finalización del 6º pleno del comité central del POUP (Partido Comunista polaco), que depuró, el pasado fin de semana, a elementos comprometidos con la gestión anterior de Gierek o con una política de mano dura.

Las discrepancias actuales nacen de la «sorpresa» e «inquietud» que causó en los medios obreros independientes las tres objeciones presentadas por el juez de Varsovia para legalizar a Solidaridad: no se reconoce en los estatutos el papel dirigente del POUP; no se habla de sindicato a escala nacional, y los responsables políticos no pueden acceder a cargos directivos en Solidaridad.

Solidaridad dirigió una carta al primer secretario del POUP, Stanislaw Kania, reclamando un diario nacional con la misma tirada de Glos Pracy (periódico del sindicalismo oficial), derecho para imprimir libros y folletos y espacios fijos en la radio y la televisión a escala nacional y regional.