Calvo Sotelo aboga por una mayor integración internacional de España

En el acto de clausura de la XIV Conferencia Anual del Instituto Internacional del Hierro y del Acero, el vicepresidente económico del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, dijo que sólo en una mayor integración internacional encontraremos soluciones estables para el problema del empleo, para la reforma de los sectores industriales, que deben acomodarse a la nueva situación, y para el problema de los pagos exteriores.En este sentido indicó que su experiencia de dos años al frente de la negociación con el Mercado Común Europeo le ha hecho especialmente sensible a la necesidad de la apertura española al exterior, que debe ser prudentemente conducida a través de la crisis sin ceder a la tentación, tan extendida hoy, de un nuevo proteccionismo. «Si nuestros problemas aparecen todavía en su dimensión nacional, sus soluciones se presentan ya en ámbitos mayores y, en primer término, en el ámbito de la Comunidad Europea».

Tras recordar sus veinticinco años de experiencia empresarial, el vicepresidente indicó a los presentes que quería hablarles sin perder «ese sentido de la realidad y de la medida que enseña la vida diaria de los talleres y de las fábricas».

Posteriormente dijo que España se ha enfrentado a la vez al reto de construir una democracia, hacer un Estado nuevo -el Estado de las autonomías regionales-, negociar la integración en las Comunidades Europeas y afrontar la crisis económica. En este contexto afirmó que hay ventajas en el tratamiento simultáneo de todos esos temas, y que también las habrá para la CEE si trata y resuelve al mismo tiempo la revisión de sus propias estructuras y la adhesión de los países candidatos.

Al recordar las líneas generales de acción expuestas por el presidente Suárez al Parlamento en materia económica, señaló que España dispone de ventajas comparativas importantes y de reservas potenciales, que le permiten mirarar hacia el futuro ciertamente con preocupación, pero también con esperanza.

Intervención de la CEOE

Otra personalidad española invitada a hablar en esta segunda y última jornada de la conferencia fue el presidente de la CEOE, Carlos Ferrer Salat, quien resaltó que la buena salud de España interesa a toda Europa y a todo Occidente. También abundó en que el potencial del crecimiento español es muy grande, a pesar de las dificultades actuales, y en que la economía española jugará a medio plazo un papel mucho más importante en el contexto internacional, una vez superadas las principales incertidumbres (consolidación del nuevo marco constitucional legal, modernización y flexibilización de las relaciones laborales, saneamiento del sector público, reconversión de algunos sectores importantes en crisis y cumplimiento puntual del plan energético nacional).