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No hay esperanzas sobre la suerte próxima de los tripulantes del "Galgomar"

El Frente Polisario pondrá en libertad, el lunes próximo, a los quince pescadores portugueses apresados esta semana cuando faenaban a lo largo de las costas del Sahara occidental, actitud que contrasta profundamente con la negativa a liberar a los 38 pescadores españoles actualmente en sus manos, si no tercia una negociación directa con las autoridades españolas.El Polisario estima que el comunicado conjunto suscrito cerca de la localidad argelina de Tínduf, el 23 de julio, por el abogado Luis Fontoura, en su calidad de negociador del Gobierno portugués, con motivo de la liberación de los quince tripulantes del pesquero Rio Vouga, constituye un reconocimiento de la soberanía de la RASD sobre las aguas territoriales del Sahara occidental.

En los círculos diplomáticos que siguen de cerca el tema de los pescadores españoles secuestrados por el Polisario han causado un profundo desagrado las noticias infundadas recogidas por medios españoles de comunicación social sobre una supuesta liberación inminente de los catorce pescadores del Galgomar. Esta información parece totalmente descabellada en el estado en que se encuentra el tema y en lo que concierne al Polisario.

Una carta de uno de los secuestrados del citado pesquero, recibida por sus familiares, en la que se pide la intervención del Gobierno español, y una emisión de Radio Sahara Libre donde sólo se hablaba de la liberación de los pescadores portugueses (la única aceptada hasta el momento por los saharauis) han sido desnaturalizadas, según parece, con las consecuencias dramáticas que esto pueda haber causado en las familias de los pescadores.

Como se ha señalado con anterioridad, una representación de esas familias podría ser autorizada por el Polisario a entrevistarse con los pescadores, único resultado al que han llegado por el momento las conversaciones mantenidas entre el Polisario y fuerzas de la oposición española, tanto en Madrid como en la capital argelina.

Cunde, también, una gran incertidumbre sobre el paradero del pescador ayamontino Juan Garrido Díaz, capturado el 2 de julio junto a otros veinte tripulantes del pesquero Cabo Juby 2, al ser abordado, por una lancha del Polisario, ya que, según rectificó ayer a EL PAÍS el embajador mexicano en Argel, Óscar González, este diplomático se entrevistó únicamente con los catorce tripulantes del pesquero Galgomar, en la visita hecha el 17 de agosto a un campo de refugiados saharaui, y no vio al otro pescador español, como se creyó en un principio.

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