El príncipe Felipe inició en Asturias su primera visita oficial

El príncipe Felipe inició ayer, en compañía de los Reyes de España, su primera visita oficial a Asturias como heredero de la Corona española. La visita, de dos días de duración, se inició por la mañana en la basílica de Covadonga, cuna histórica de la Reconquista, y contó en su primera jornada con un apretado y extenso programa de actos, en el que destacó la constitución de la Fundación Principado de Asturias, entidad cultural y científica cuyo patronazgo fue ofrecido ayer al joven príncipe Felipe.

Los Reyes y el Príncipe de Asturias, que estuvieron acompañados en esta primera jornada por los ministros de Cultura y de Universidades, Iñigo Cavero y Luis González Seara, respectivamente, llegaron al aeropuerto de Ranón a las 9.30 horas y, tras ser recibido por las autoridades de la región, se trasladaron a la basílica de Covadonga.En el centro histórico de la Reconquista, don Juan Carlos, tras pasar revista a una compañía de honores del Regimiento Príncipe, con guarnición en Oviedo, saludó, en compañía de la Reina y del Príncipe, a una amplia representación de las instituciones regionales y locales asturianas y a los parlamentarios de la región, entre ellos al centrista Rafael Calvo Ortega y al socialista Luis Gómez Llorente, diputados al Congreso por esta provincia.

Los primeros actos de la visita al Principado consistieron en una breve ceremonia religiosa en la cueva donde se encuentra la Virgen de Covadonga, conocida popularmente como la Santina, y en el descubrimiento de una inscripción conmemorativa de la visita al recinto histórico del Príncipe Felipe. Posteriormente, los Reyes y el Príncipe de Asturias acudieron al interior de la basílica y saludaron al regidor de pastos de la montaña de Covadonga. Los Reyes y el Príncipe heredero fueron aclamados en varias ocasiones por las numerosas personas que se habían congregado en los alrededores del templo.

Desde las montañas de Covadonga, el séquito real se trasladó a la ciudad de Cangas de Onís, cuyo alcalde agradeció a los Reyes y al Príncipe su visita a esta ciudad en un acto público que tuvo como escenario el balcón principal de la casa consistorial. El alcalde de Cangas de Onís recordó en sus palabras la vinculación histórica de la ciudad, primera capital de la Reconquista, con la Corona española y, en especial, con el Príncipe de Asturias.

Tras la breve estancia en Cangas, donde los Reyes y el Príncipe recorrieron a pie la calle principal de la ciudad, la comitiva se dirigió a Arriondas, localidad en la que se procedió a la inauguración de un centro de capacitación agraria. Este centro tiene un presupuesto de ochenta millones de pesetas. Ha sido financiado por el Ministerio de Agricultura y está capacitado para albergar 42 plazas de alumnos en especie de internado gratuito.

En Arriondas, un grupo de niños del colegio nacional del pueblo mostró al paso de la comitiva unas pancartas, en las que, junto con una fotografía del Príncipe, se leía: «Somos setecientos niños en un colegio para trescientos. Ayúdanos a conseguir un colegio de EGB».

A primeras horas de la tarde, los Reyes y el príncipe Felipe se trasladaron a la finca Las Huelgas, una noble casona asturiana, que data de 1580 y que fue adquirida por la caja de ahorros, que la emplea como centro agrícola en el que se imparten cursos de fruticultura. En Las Huelgas, las autoridades de la región ofrecieron un almuerzo a los Reyes y al Príncipe de Asturias.

Un caballo para el Príncipe

Tras el almuerzo, la comitiva se trasladó a la vecina localidad de Piloña, en cuyo término municipal se encuentra el monte de Sueve, zona de Asturias donde viven en libertad los caballos asturcones.En una pradera próxima al municipio, los Reyes y el Príncipe presenciaron el marcaje con los hierros del Príncipe de Asturias de un ejemplar de caballo asturcón.

Desde Piloña, la comitiva real se dirigió a Oviedo, aunque se detuvo por espacio de unos minutos en las localidades de Infiesto, Nava y Pola de Siero. En estas tres localidades los miembros de la familia real se bajaron del automóvil y saludaron a la población, que, congregada en la carretera, ovacionó insistentemente a los Reyes.

Ya en Oviedo, con asistencia de autoridades, representaciones de instituciones culturales y científicas, cuerpo diplomático y otras personalidades, se desarrolló la firma del acta de constitución de la Fundación Principado de Asturias. Esta fundación, nacida con la voluntad de crear en la actualidad un vínculo entre la región asturiana y el heredero de la Corona española, tiene como fines revitalizar la vida cultural, científica y técnica de Asturias y, apoyar, mediante subvenciones, proyectos de investigación y de creación surgidos en España o en la comunidad de habla castellana.

Aporte cultural

En el transcurso del acto fue convocado el Premio Príncipe de Asturias 1980; le fue ofrecido a don Felipe el patronato de la fundación y fue leída por el teniente general Manuel Diez Alegría, miembro de la Real Academia de la Lengua, una lección magistral, que versó principalmente sobre el aporte cultural de Asturias en la historia de la nación española. Diez Alegría hizo un recorrido histórico desde los años de la Reconquista, se detuvo en los principales focos culturales surgidos a lo largo de los siglos e hizo especial hincapié en el papel que representó y sigue representando la comunidad asturiana emigrante a Latinoamérica. Terminó su intervención, de veinticinco minutos, resaltando el significado que tiene para los asturianos el vinculo de su región a la Corona española, confirmado en esta ocasión con la presencia del príncipe Felipe, del que dijo que era un gran deportista «y, naturalmente, democrático».La primera jornada de la visita real terminó con una cena ofrecida por la fundación en honor de los Reyes y el príncipe Felipe, tras la cual se celebró un concierto de música de cámara.