Se agrava la situación en El Salvador
La violencia política en El Salvador aumentó sensiblemente ayer, al estallar ocho bombas en la capital durante la madrugada. Al menos veintitrés personas murieron en varios puntos del país en diversos enfrentamientos.Cinco civiles perecieron durante el desalojo, llevado a cabo por el Ejército, de la catedral de San Miguel, que había sido ocupada el miércoles por izquierdistas.
En el área metropolitana de la capital se registraron nutridos tiroteos que causaron siete muerte más, también a civiles. A esto se suman las explosiones de diversos artefactos, uno de los cuales había sido colocado a unos doscientos metros de la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA), donde un grupo de izquierdistas mantiene a once rehenes desde el miércoles.
Hasta el momento no se han iniciado las negociaciones entre los ocupantes y la OEA, ya que la llegada de un negociador especial de esta organización, que se anunció ayer como segura, no se ha producido todavía.
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