Huelga de hambre de los parlamentarios "abertzales" navarros

Los parlamentarios forales de Herri Batasuna (HB) y Amaiur iniciaron ayer por la tarde una huelga de hambre indefinida en la sede del Parlamento, que no finalizará en tanto no sea puesto en libertad el vicepresidente de la Cámara, José Antonio Urbiola. La ponencia de reglamento del Parlamento no pudo celebrar ayer una sesión por no participar los representantes de HB, PNV, Amaiur y Jesús Casajús, del Grupo Mixto, en señal de protesta por la detención del dirigente abertzale.En la huelga de hambre participan los cinco parlamentarios de Amaiur y el diputado foral del mismo grupo, Jesús Bueno, así como los siete parlamentarios de HB y su diputado foral, Angel García de Dios. Por otra parte, HB, junto a otras fuerzas políticas de izquierda y abertzales, iniciará este fin de semana, en los principales ayuntamientos del País Vasco, encierros y huelgas de hambre para protestar por la represión en Euskadi.

Durante una conferencia de Prensa celebrada ayer en el Parlamento Foral de Navarra, el dirigente de HB Txomin Ziluaga hizo un análisis de la situación politica vasca, centrándose en tres temas: el atentado contra Angel Etxaniz, militante de HB; la detención de Urbiola y la represión policial en la campaña de solidaridad de Euskadi con Andalucía. Con respecto al asesinato de Etxániz, Txomin Ziluaga afirmó que había sido obra de los controlados, «que obedecen a un tipo de trabajo concreto, que ejecutan militarmente y cuentan con total impunidad». En cuanto a la detención de Urbiola, señaló que respondía a una maniobra del PSOE, «que por estos procedimientos trata de ocultar sus contradicciones sobre el tema Navarra-Euskadi», y manifestó que rechazaban todas las acusaciones del ministro del Interior, Juan José Rosón, ya que, según un informe de Amnistía Internacional, dado a conocer en Caracas, la tortura es una práctica habitual en el Estado español.

Por lo que respecta a la campaña de solidaridad con Andalucía, el dirigente abertzale dijo que se había reprimido con dureza, y precisó que «las libertades democráticas en Euskadi no existen, ni siquiera en sus formas externas. Este Gobierno no tiene capacidad política ni democrática para solucionar los problemas de Euskadi».

La policía mantiene un mutismo total acerca de los cargos por los que se acusa a José Antonio Urbiola, aunque en fuentes oficiales se sigue insistiendo en que existen algunos datos, al margen de sus declaraciones, en el seno del Parlamento Foral navarro, que relacionan al detenido, vicepresidente de la institución, con la rama militar de ETA.

Mientras tanto, en las provincias vascas continúan las reacciones de protesta por parte de sectores de la izquierda abertzale en torno al caso Urbiola.