Subidas continuadas a lo largo de la semana

La pasada semana resultó, a efectos estadísticos, uno de los ciclos bursátiles más uniformemente positivos que se recuerdan.La diferencia entre el valor del índice general al cierre de la tanda anterior y su posición el pasado viernes se estableció en dos puntos y medio, lo que supone una subida media diaria de sesenta centésimas.

Y sesenta centésimas de mejora mantenidas como constante a lo largo de cuatro sesiones era algo que hacía mucho tiempo que no se veía.

Al margen de razones más o menos complicadas, hay dos puntos fundamentales que han venido a determinar estos resultados. Por una parte, la manifiesta escasez de oferta que se acentuaba en valores de gran peso específico como son los bancos o las eléctricas, y, por otra parte, es innegable la existencia de unos flujos compradores que, interesadamente dirigidos unas veces, o actuando con libertad en otras ocasiones, generan un discreto ambiente comprador.

Por sectores, los bancos, con mejoras selectivas, generadas casi siempre por los propios interesados, respiraban un tonillo general de sostenimiento sin problemas.

Las eléctricas continuaron subiendo a impulsos de cierto número de órdenes compradoras que no hallaban contrapartida de venta suficiente. Iberduero asumió el protagonismo del grupo, apuntándose nada menos que siete enteros de mejora a lo largo de la tanda. Hidrola, por su parte, también mantuvo sus alzas hasta que su cambio se aproximó al 70%, precio que, por el momento, va a resultar difícil que supere, ya que cuenta con una importante cantidad de papel acumulado.

Las químicas dieron muestras de mayor consistencia que en semanas anteriores, y, en general, se mantenían sobre sus cambios precedentes sin excesivos esfuerzos. La excepción la constituyó Petróleos, valor que contó a diario con una abundante muestra de títulos puestos a la venta, cuyo principal proveedor sería el banco más privado de entre los públicos.

También hay que señalar como hecho significativo los 3,75 enteros que subía Telefónica a lo largo de la semana. El monopolio viene dando claras muestras a diario de sus deseos de mantener su cambio próximo al de las eléctricas, y para ello sus mentores no dudan en apoyarlo cuando el papel supera ampliamente a la demanda.