UCD apela a la solidaridad de otros partidos para sacar adelante el estatuto
El comité regional gallego de UCD reiteró ayer la «voluntad de que la autonomía sea resultado de la convergencia de las fuerzas representativas de Galicia», en una declaración oficial emitida al término de la reunión que mantuvo la ejecutiva de dicho partido con el secretario general de UCD, Rafael Calvo Ortega, en Santiago de Compostela.
Según dicha declaración, «se ha insistido en la necesidad de un compromiso buscando coincidencias sobre los puntos dudosos con una finalidad integradora». Por primera vez reconocieron los portavoces gallegos de este partido la existencia anterior de contactos previos con otros grupos. «La decisión negociadora de UCD», dice la declaración, «no es un planteamiento nuevo, sino la continuación de un propósito que ha permitido ya contactos iniciales que el comité de UCD de Galicia desea proseguir y ampliar».Tanto Rafael Calvo como el presidente gallego, Manuel Iglesias, o el secretario general, Miguel Sanmartín, fueron extraordinariamente cautos a la hora de precisar estos contactos. EL PAIS supo, con toda certeza, que no pasaron hasta ahora de tomas iniciales de posición, que sólo fueron establecidas oficialmente con el PSOE, a través de la famosa cena que desencadenó la dimisión del secretario general socialista en Galicia, Rodríguez Pardo.
Cautela en la oferta negociadora centrista
La oferta negociadora que esperaban algunos sectores autonomistas de Galicia por la parte de UCD, en víspera de los contactos que se dice que va a mantener Adolfo Suárez, aprovechando sus vacaciones, quedó cifrada únicamente en estas palabras que emitió ayer el comité regional: «Entendemos la autonomía como un objetivo solidario que no puede ser impuesto desde ninguna posición, aunque sea mayoritaria, y, en este sentido, apelamos a la responsabilidad de todos los grupos políticos e instituciones sociales y culturales para colaborar en este propósito, cuyo interés no puede ser exclusivo de ningún partido».A pesar de la cautela, un portavoz muy cualificado de UCD no dudó en concretar a EL PAIS: «El hecho de que las esperanzas se cifran especialmente en conseguir un pacto autonómico con el PSOE y con el Partido Galleguista, sin descartar a cualquier otra fuerza política que tome la dirección de la autonomía». Esta es la idea que, según parece, va a inspirar también algunos de los próximos contactos del presidente Suárez antes de abandonar su retiro veraniego de El Grove.
Expectación ante el congreso del PSOE
Lo que resulta mucho más difícil de prever es la posible respuesta socialista a esta invitación de pactar el próximo referéndum gallego. Algunas fuentes oficiosas del PSOE descartan la posibilidad de que José Luis Rodríguez Pardo vuelva a ocupar la secretaría general a partir del congreso extraordinario que se inicia el sábado en Vigo. Según esta opinión, el actual alcalde vigués, Manuel Soto, sería el candidato de transición. No hay que olvidar que Rodríguez Pardo fue, hasta el momento, el líder socialista gallego que representó más expresamente la voluntad de negociar con UCD el apoyo del estatuto.Falta por saber ahora lo que va a ofrecer personalmente el propio presidente del Gobierno, cuando reciba a algunos líderes de otros partidos cuyo voto negativo al «estatuto de UCD» sigue todavía firme. La posibilidad más fácilmente aventurable es que Suárez prometa que no se vaya a tener demasiado en cuenta la polémica transitoria tercera del estatuto, que ha sido la piedra clave de muchas posiciones contrarias a su aprobación. Otra importante sería que se dejara formalmente abierta la alternativa de remodelar el Estatuto de Galicia, por parte de los propios gallegos, una vez que quede constituido el próximo Parlamento regional.
