Numerosos incidentes de orden público en el País Vasco y Navarra

Un policía nacional resultó ligeramente herido en Vitoria, al estallar anoche una bomba que trataba de desactivar. El agente, Florencio Pérez, había conseguido trasladar el paquete al exterior de la sala de fiestas en que había sido colocado, cuando aquél hizo explosión, arrojando al suelo al policía por efecto de la onda expansiva. Previamente se había recibido una llamada anónima, en la que un presunto portavoz de ETApm había advertido la colocación del artefacto. Numerosos incidentes de orden público se produjeron el pasado fin de semana en el País Vasco.

Una villa de Oyarzun (Guipúzcoa), propiedad de un constructor, fue ametrallada por varios desconocidos, desde un automóvil en marcha, a primera hora del domingo. En el lugar del atentado fueron recogidos más tarde ocho casquillos de bala, del calibre 9 milímetros Parabellum, informa nuestro corresponsal en San Sebastián, Victorino Ruiz de Azúa.

La villa Txipeitia-Baitia es propiedad de Julián Olaizola, constructor al que se considera de ideología nacionalista. Los disparos fueron efectuados desde un taxi Chrysler 180, robado a punta de pistola poco tiempo antes a su propietario en Rentería.

Inmediatamente después del ametrallamiento, que no provocó daños personales, una voz anónima anunció telefónicamente al diario Eguin la entrega en breve plazo de un comunicado explicando las razones del atentado. En la misma llamada se informó del lugar donde el comando abandonó el automóvil robado.

Por otra parte, dos niños, de doce y nueve años de edad, respectivamente, encontraron una granada de mano en un basurero de la localidad vizcaína de Orduña. Los niños envolvieron la granada -que carecía de espoleta- en un papel y la entregaron a la Policía Municipal. El basurero está situado en la carretera que conduce del municipio de San Salvador del Valle al barrio de la Reineta.

Otro incidente se produjo en Bilbao, al quedar destruido por un incendio el camión matrícula BI-736.621. El hecho se produjo a consecuencia del lanzamiento de un artefacto sobre el camión, desde una moto, por causas desconocidas.

A su vez, miembros de la Policía Nacional provocaron una explosión controlada en un Seat 600, matrícula de Bilbao, a primeras horas de la madrugada de ayer. El vehículo se hallaba mal aparcado, en las cercanías del Gobierno Civil de Vizcaya, y en su interior habían sido vistas varias cajas que despertaron sospechas, informa Europa Press. Avisada la propietaria del vehículo, declaró que ella había dejado bien aparcado el coche, pero que alguien lo había desplazado al lugar en que fue encontrado.

Entierro del trabajador asesinado por ETApm

Por otra parte, el domingo, por la tarde, fueron enterrados los restos del trabajador Mario González Blasco, asesinado el día anterior en atentado terrorista, que reivindicó la rama Político-militar de ETA. Mario González era soldador de la empresa Agruminsa, de Baracaldo.

Los trabajadores de los tres turnos de dicha empresa acordaron realizar un paro de veinticuatro horas en señal de duelo por su compañero, informa nuestra corresponsal, Tonia Etxarri. Por su parte, el pleno del Ayuntamiento de San Salvador del Valle condenó en sesión extraordinaria la acción llevada a cabo contra el trabajador vizcaíno, vecino de la citada localidad.

Para la corporación municipal, «una vez más, los asesinos que dicen actuar como libertadores de Euskadi han vuelto a matar friamente y han hecho su juicio particular, condenando a nuestro vecino. Asesinatos como este y otros similares atentan contra la autonomía de Euskadi, intentando envolver al pueblo vasco en una espiral de violencia cuyo único objetivo es hacernos retroceder a una nueva etapa dictatorial fascista».

El ayuntamiento, después de solidarizarse con el dolor de la familia de la víctima, opina que «este nuevo salvaje atentado es un desprecio por algo que se sitúa por encima de cualquier otra consideración o planteamiento: el derecho de cualquier ciudadano a vivir».

Detenciones en Navarra

El Gobierno Civil de Navarra reconoció ayer, a través de una nota aficial, que el presunto miembro de ETA Militar detenido el pasado día 1 en Irurita, José María Aldako, se fugó sobre las 22.45 del mismo día de las dependencias policiales, sin que por el momento haya podido ser localizado. Según la nota gubernativa, Aldako «cuando era conducido, tras la práctica de las diligencias policiales, se abalanzó sobre uno de los funcionarios que le custodiaban y tras arrojarle al suelo consiguió huir de las dependencias policiales».

De acuerdo con la nota oficial, la policía detuvo el pasado viernes en Elizondo e Irurita a seis personas, en relación con actividades de ETAm. De los seis detenidos, tres quedaron posteriormente en libertad, por lo que en la actualidad permanecen incomunicados en el Gobierno Civil de Navarra José Miguel Arizmendi, María Isabel Gaztelumendi y Angel María Eliceche, a los que se les ha aplicado el decreto-ley sobre medidas antiterroristas.

Por otro lado -informa nuestro ccrresponsal en Pamplona, Fermín Goñi-, el pasado día, 2 fue detenido el súbdito francés Miguel Marie Goyeneche, «por presuntas actividades relacionadas con ETAm, aplicándose al mismo la legislación sobre grupos y bandas armadas».

De igual forma, la Guardia C¡vil ha detenido al francés Roland Villaplana, por tenencia ilícita de armas. Según ha podido saber EL PAIS, a Villaplana, detenido en Irurzun, la Guardia Civil de aquella localidad encontró en su vehículo una escopeta y diversa munición, sin que presentara el correspondiente permiso de armas. Al parecer, Villaplana no está relacionado con ETA.