El Ballet de Maurice Bèjart presenta el "Bolero" de Ravel, en el Palacio de los Deportes

Hoy, jueves, el Ballet Siglo XX, que dirige Maurice Béjart, presentan nueve, programa compuesto por Actus tragicus, con música de Juan Sebastián Bach; ¿Serait-ce la mort?, con la música de R. Strauss, y el Bolero, de Ravel. Las representaciones de este segundo programa concluirán el 22 de junio.

Sobre Actus tragicus escribe el propio Bèjart: «todo induce a creer que fue alrededor de 1711 que el entonces joyen Juan Sebastián Bach compuso una cantata conocida con la denominación de Actus tragicus, verdadero oficio fúnebre concebido y escrito en memoria de uno de sus maestros fallecidos en Weimar. La conmovedora meditación sobre la muerte Du musst sterben ("es preciso morir") sobre la Providencia Divina: ich hab'mein Sach'Gott heimgestellt ("me he puesto en las manos de Dios") constituye no solamente una de las comas del arte musical de Bach, sirio también un acto de fe que cautiva por su pureza, su profundidad y hasta por su simplicidad ».«Pero para un cristiano como Juan Sebastián Bach», añade el coreógrafo, «la muerte, por trágica que pueda parecer, no es una conclusión negativa: la vida del alma prosigue en su unión con Dios y nos ha parecido normal hacer seguir Actus tragicus por la Cantala 51, sublime explosión de alegría celeste en donde la palabra bíblica Aleluya viene a sellar el canto humano como una promesa de vida eterna».

«La danza», concluye Béjart, «no hace más que seguir rigurosamente las intenciones musicales y religiosas de la partitura, sólo que riendo ser un contrapunto visual, a veces y otras emotivo, de canto».

¿Serait-ce la mort? sobre música de Ricardo Strauss fue estrenada en Marsella en 1970. Sobre ella escribe Bèjart: «en umbral de la muerte, un hombre vuelve a ver a. cuatro mujeres a las que había amado por turno. Tres de ellas han compartido, cada una, un momento de su existencia; la cuarta -figura enigmática- tan sólo ha sido brevemente vislumbrada por él. Es, por tanto, la imagen de ésta la que le acompañará en la muerte. Los textos de estas cuatro lieder son -para las tres primeras canciones- de Hermann y la cuarta, de Josef von Eichendorff. El título del ballet, ¿Serait-ce la mort?. corres ponde a la última Crase de esta obra cantada, que, por otro lado, es la producción postrera de Strauss».

El programa que se presenta hoy en el Palacio de los Deportes de Madrid concluye con el Bolero, de Ravel, estrenado en Bruselas en 1960. Maurice Bèjart concreta en estas palabras su concepción de la obra de Ravel: «Música harto conocida y, por tanto, siempre nueva gracias a su sencillez. Una melodía (de origen orienta! y no español) se enrosca incansablemente en sí misma. Símbolo femenino, flexible y cálido de una inevitable cualidad. Unritmo varonil, que aún permaneciendo siempre igual, va aumentando de volumen e intensidad devorando el espacio sonoro y englutiendo, por fin, la melodía».

En enero de 1979, Maurice Béart confió el papel principal -el de la Melodía- a un muchacho, al mismo tiempo que el ritmo era interpretado por muchachas. Actualmente, presentado en su nueva forma, este ballet es enteramente masculino.