España no renuncia a sus derechos en Tierra Santa, según Exteriores

La Oficina de Información Diplomática (OID) del Ministerio de Asuntos Exteriores desmintó ayer, con diez días de retraso, una información publicada por EL PAIS, en la que se anunciaba que España renunciaba a sus propiedades y derechos en Tierra Santa. La OID no niega, sin embargo, la firma de un acuerdo entre la Santa Sede y el Gobierno de Madrid, al término del cual España pierde la custodia de Tierra Santa, que ejerce junto con Francia e Italia.En el Gobierno tripartito de la custodia, el procurador, un franciscano español, actúa, en contra de lo que afirma la OID, en nombre de España. Aunque el procurador se sitúe sólo en tercer lugar en el orden jerárquico del Gobierno de la custodia, su función de distribución de fondos, tanto para la protección de los lugares santos como para la ayuda económica de la población árabe, especialmente la católica, le han convertido en la autoridad católica con más poder en Tierra Santa. Su influencia y su prestigio recaen indirectamente sobre España.

La aplicación del acuerdo implicaría no sólo la desaparición de la figura española de! procurador, sino también la pérdida de las propiedades de Tierra Santa, Chipre, Turquía y Siria, que, aun no siendo españolas, han sido edificadas y mantenidas en muchos casos con dinero español y han sido siempre administradas por el procurador en nombre de España. En ellas residen padres franciscanos españoles, rotundamente opuestos al acuerdo. El único error contenido en el artículo publicado por EL PAIS, el pasado 7 de junio, consistía en afirmar que el acuerdo firmado con el Vaticano lo había sido por el ex ministro de Exteriores José María de Areilza, cuando en realidad lo fue por el actual responsable de la diplomacia española, Marcelino Oreja. Areilza fue, sin embargo, el principal negociador del mencionado convenio. La OID no habla de este error.