Querella del Ayuntamiento de Bermeo contra un guardia civil por presunta violación

El pleno del Ayuntamiento de Bermeo (Vizcaya), ha acordado presentar querella criminal, como tal Corporación, contra el guardia civil adscrito al puesto de dicha localidad costera Pedro García López, presunto autor de la violación a punta de pistola de una joven bermeana. El pleno aprobó también sendas mociones que declararon «personas no gratas a los miembros de las FOP» y exigen de la dirección de la Guardia Civil el juicio del presunto violador. Esta segunda moción precisa que, «en caso de ser declarado enfermo mental se exigirán responsabilidades a quienes, en tales condiciones, autorizaron su ingreso en el Cuerpo».

Los familiares de la víctima habían presentado ya la correspondiente denuncia tras haber reconocido, aparcado a las puertas del cuartelillo, el automóvil donde, presuntamente, se produjo la violación. Una manifestación de protesta, convocada por una veintena de partidos políticos, sindicatos y asociaciones populares, que concentró a más de 4.000 personas en la noche del miércoles, fue duramente reprimida por la Guardia Civil, por lo que el Ayuntamiento ha protestado oficialmente ante el gobernador civil de la provincia.Según la versión de la víctima y una compañera suya -ambas menores de edad y cuya identidad no ha sido revelada-, los hechos se produjeron en el interior de un automóvil Renault 12, propiedad del mencionado guardia civil, poco después de haber sido recogidas por éste cuando hacían auto-stop a la salida de la vecina localidad de Mundaka.

El presunto autor de la violación se presentó a las dos jóvenes, según el relato de éstas, como profesor de Química. En un momento dado, detuvo el coche -en un paraje conocido como atalaya de Matxitxako- y comenzó a abusar de una de las jóvenes. Ante las protestas de éstas, el conductor sacó una pistola diciendo: «Las balas salen por aquí muy deprisa». Acto seguido, apagó las luces del coche y consumó la violación de una de las jóvenes.

Tras reconocer el lunes por la mañana el automóvil aparcado ante el cuartelillo, la víctima y su madre narraron los hechos al sargento del puesto.