Los colaboradores del derrocado régimen liberiano serán procesados
El Comité Militar de Rehabilitación Nacional, que tomó el poder el sábado en Monrovia (Liberia), inició ayer el proceso de las personalidades y dignatarios del régimen anterior. Centenares de personas, entre ellas el presidente del partido gobernante desde 1878, True, Whig Party, y Reginald Thomson fueron detenidas.Los seguidores del sargento Samuel K. Doe, que van a juzgar a estas ex personalidades por «alta traición, corrupción y violación de los derechos humanos», han querido hacer de los juicios un auténtico espectáculo, y muchos de los detenidos, según relatan las agencias de prensa, fueron sacados de, sus domicilios y llevados ante los tribunales con un sucinto slip.
Los juicios tienen lugar en el Barclays Training Center, el cuartel más importante de Monrovia. La mujer del asesinado presidente Toibert y un hermano del depuesto jefe del Estado figuran entre los detenidos que van a pasar juicio. El hijo mayor de Toibert, Adolphus Benedictus, sin embargo, pudo huir y es actualmente buscado por el Ejército.
Por su parte, el sargento Samuel K. Doe, nuevo hombre fuerte de Liberia, se dirigió ayer al país a través de la televisión para explicar que había llevado a cabo el golpe de Estado «contra la corrupción y el alza de los precios».
En el nuevo Gobierno, anunciado el domingo por el sargento Samuel K. Doe, figuran siete militares de dieciocho miembros en total. Como nota curiosa, tres antiguos ministros del Gabinete Toibert conservarán sus carteras: Sanidad, Obras Públicas y Educación.
Los aeropuertos y fronteras del país siguen cerrados y la fuerza armada ha recibido órdenes de conducir a la capital a toda aquella persona del antiguo régimen que pretenda salir. Las tiendas de la capital, principalmente los grandes comercios propiedad de libaneses, permanecen cerrados, a pesar de la orden en sentido contrario dada por los soldados.
La población tampoco ha concurrido al llamamiento que le ha sido formulado para reintegrarse a los trabajos, y las multitudes se congregan, principalmente ante los cuarteles, para asistir al espectáculo de los juicios.
Existe normalidad absoluta entre la población española residente en Liberia, según informaron fuentes diplomáticas.
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