La pensión de Tarradellas
Hemos sentido vergüenza al leer en EL PAIS del 28 de marzo la noticia según la cual Josep Tarradellas dispondrá de una pensión vitalicia y transferible a su mujer e hija de 400.000 pesetas mensuales, más un piso de lujo en Barcelona, personal de servidumbre, secretaria y escolta, algún que otro coche con su correspondiente chófer, etcétera, y todo a cuenta del bolsillo de los ciudadanos contribuyentes.Por muy honorable que sea ese señor, el que gane en un mes lo que muchos no ganan ni siquiera en un año de mucho trabajo y sudor es una injusticia bochornosa, una de tantas que ponen de manifiesto las contradicciones de este sistema social, en el que hay tantos que mendigan día a día un puesto de trabajo mientras que unos pocos disfrutan de beneficios tan exagerados como indignantes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
