La crisis del PTE
En el número del pasado domingo 23, y bajo el titular de «El comité central del PTE discute hoy la crisis del partido», se realizan una serie de afirmaciones que no corresponden a la verdad.Se afirma que el pasado día 9 el comité ejecutivo nacional del Partido de los Trabajadores de Andalucía -donde efectivamente la mayoría de sus miembros proceden del antiguo PT, nueve sobre catorce- aprobó como resolución el documento firmado por varios de sus dirigentes titulado «Por un partido para la revolución socialista. Crítica al proyecto de colectivo radical», y que se criticó la actitud de los antiguos dirigentes del PT y sus proyectos de estrategia radical.
En el comité ejecutivo del PTA del pasado día 8 (no 9) se acordó, por diez votos a favor y tres en contra, sancionar a tres militantes con la separación de sus cargos ejecutivos en sus correspondientes comités (no expulsarles del partido, como también se ha afirmado, y ni siquiera destituirles del comité nacional), debido a sus reiteradas actuaciones políticas contrarias a las directrices del partido. Asimismo se acordaron una serie de normas para la organización del debate interno, pero en modo alguno se aprobó, y ni siquiera fue discutido, ya que entonces todavía no estaba realizado, el documento citado, que lleva la firma de siete destacados militantes del PTA, entre los que me incluyo, y que es una respuesta crítica al documento elaborado por Eladio García Castro y Enrique Palazuelos con el título de «Una fuerza para una nueva civifización».
Tanto en lo que a mí respecta, como estoy seguro que a todos los demás firmantes, tengo el máximo interés en hacer pública la más enérgica protesta por el falseamiento de la realidad: una cosa es que un importante sector del PTA (yo creo que mayoritario, como en todo caso se demostrará en el congreso, ya fijado para el 31 de mayo y el 1 de junio) estemos en total desacuerdo con el fondo y la forma de las propuestas radicales de Eladio y otros dirigentes del antiguo PT, y otra bien distinta que esta posición nuestra, que responde a una actitud de honestidad política, sea manipulada o «interpretada» por otros sectores del actual Partido de los Trabajadores para pescar en río revuelto.
En este sentido somos muchos los que en Andalucía estamos dispuestos -y lo estamos demostrando ya- a rechazar todas las muy diversas manipulaciones que están tratando de realizar respecto al PTA gentes procedentes de los dos antiguos partidos estatales. Desde nuestra nacionalidad andaluza, y ahora desde EL PAIS, reiteramos nuestra exigencia de que en el debate interno, tan imprescindible, lo único que cuente sean las ideas y no el carisma personal de quienes las suscriban o el partido de procedencia de éstos. Y nuestra repulsa de todos los hechos consumados que a partir de la actividad política o del falseamiento de noticias van encaminados a impedir un debate profundo, limpio y democrático.
(secretario general del PTA)