Bandrés: "Euskadi ha pasado factura a UCD por su nefasta política autonómica"

Cuando aún no eran definitivos los resultados de las elecciones al Parlamento, pero cuando ya se evidenciaba que Euskadi ha hecho en esta ocasión un voto nacionalista, Juan María Bandrés, diputado de Euskadiko Ezkerra y primer candidato de la coalición en Guipúzcoa, afirmaba: «Con el resultado de la votación puede decirse que el pueblo le ha pasado la factura a UCD por su deficiente política autonómica en Euskadi y, de paso, ha metido la propina del pueblo andaluz.»Juan María Bandrés, que califica de «satisfactorio» el descalabro de UCD en estas elecciones, cree que aquél se ha debido fundamentalmente a la política autonómica de este partido en el País Vasco, y concretamente en lo que hace al desarrollo del Estatuto.

«Esta política», afirma, «ha sido nefasta y la está pagando. UCD no es ni ha sido autonomista; no se cree la autonomía de la que habla. »

Considera, por contra, el diputado de EE que es muy satisfactorio el triunfo de la opción abertzale, en cualquiera de sus tendencias. «Euskadi», señala, «ha votado nacionalista y es lógico. Hay que tener en cuenta que, lo que se elegía era un Parlamento vasco, que no es lo mismo que elegir unas Cortes Españolas.»

Un exceso en el peso del PNV, como el obtenido en estas elecciones, no es, sin embargo, para Bandrés del todo satisfactorio, «porque entendemos», precisa, «que el nacionalismo dirigido por la derecha no es beneficioso para la clase trabajadora de Euskadi».

Aunque adelantando su respeto a los dirigentes del PNV, Juan María Bandrés temía en la madrugada del lunes la existencia de indicios reales de caza de brujas o macarthysmo en algunos sectores del PNV. «En los últimos días de elecciones», matiza, «se ha producido una presencia o infiltración en las filas del PNV de personas que podrían estar perfectamente en AP o UCD.»

Pese a lo mucho que se ha hablado durante la campaña de la posibilidad de que tras las elecciones pudiera crearse en Euskadi un frente abertzale, Bandrés insiste en que no ha existido acuerdo o pacto previo con el PNV en este sentido. «Yo personalmente pienso», señala, «que un Gobierno monocolor sería un desastre nacional. Lo digo porque nosotros queremos representar los intereses de la clase trabajadora en Euskadi y la presencia en el poder de un modo absoluto y aplastante de un partido nacionalista, pero de derechas, no iba a ser buena para los intereses de la clase trabajadora. Un pacto, que puede darse por parte del PNV, para reforzar su endeble mayoría en el Parlamento, sería, bajo mi punto de vista, nefasto.»

No se recata Juan María Bandrés en hacer un llamamiento al PNV para que estudie la posibilidad de contar con Euskadiko Ezkerra en las tareas de gobierno. «Nuestra coalición», aclara, «ha pasado por la difícil experiencia de formar parte de un Gobierno de concentración (el CGV) y ha gobernado junto con opciones tan distintas como UCD. La experiencia no ha sido buena, pero sí valiosa, y hemos aprendido. Con facilidad Euskadiko Ezkerra podría gobernar con posiciones más templadas y menos centralistas que los representantes de UCD en Euskadi.»