Juicio contra cinco presuntos miembros de ETA militar

Cinco presuntos miembros de ETA militar comparecieron ayer ante la Audiencia Nacional, acusados de varios delitos, entre ellos, de los asesinatos, el día 5 de diciembre de 1978, en San Sebastián, del comisario de policía José María Serrails Llasera, del subcomisario Gabriel Alonso Peregil y del policía municipal Angel Cruz Salcines.En el momento en que el fiscal procedió a elevar a definitivas sus conclusiones, el juicio fue suspendido a petición de los abogados defensores, en base a que el representante del ministerio público había aumentado fuertemente su petición de penas en relación con dos procesados. Con anterioridad, el público había sido desalojado de la sala de audiencia al prorrumpir en gritos de Gora ETA.

El fiscal, en sus conclusiones provisionales, solicitaba para Miguel Sarasqueta un total de 104 años y tres meses de privación de libertad; para José Miguel Azurmendi, catorce años y tres meses; para Felina Lacombre, Ildefonso Salazar y Angel Aguirre, dos años de prisión menor para cada uno de ellos. Sin embargo, al elevar a definitivas sus conclusiones, solicitó para Azurmendi un total de 45 años, por considerarle autor de tres delitos de conspiración para el asesinato, y para Felina Lacombre, un total de 38 años y tres meses, como encubridora de tales delitos.

Felina Lacombre, interrogada por el fiscal, manifestó que vivía con Sarasqueta, pero no sabía que éste pertenecía a ETA. lldefonso Salazar negó toda vinculación con ETA y dijo que ayudó a los refugiados en Francia familiares de presos. En el mismo sentido se pronunció el procesado Angel Cruz. Los procesados Miguel Sarasqueta y José Miguel Azurmendi no estuvieron presentes en el juicio, pues, al comienzo del mismo, fueron conducidos a los calabozos por su insistencia en declarar en euskera.