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Vecinos de la calle Quero se concentran ante la Caja de Ahorros

Unos cuatrocientos vecinos de la calle de Quero, en el barrio de Aluche, se concentraron el pasado sábado, según fuentes de los convocantes, frente a la fachada principal de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Madrid, en la plaza de Celenque, para mostrar su protesta por la falta de colaboración de la citada entidad bancaria para solucionar sus problemas, derivados de la obligatoriedad que legalmente tienen de pagar una hipoteca que fue suscrita por los promotores de la Ciudad Parque Aluche sin conocimiento de los compradores y que hoy supone del orden de los cincuenta millones de pesetas.Los vecinos concentrados intentaron proceder a la escenificación de una pequeña obra de teatro que sobre su problema habían preparado. Sin embargo, fuerzas de la Policía Nacional, que se habían desplazado hasta la zona, les obligaron a desistir de su intento y a retirar todas las pancartas que llevaban. Unicamente les fue permitido dar vueltas en tomo a la plaza de Celenque.

Los problemas de ese grupo de vecinos parten del año 1970, fecha en la que la empresa Maor, constructora de las viviendas de la calle de Quero, suscribió una hipoteca con la Caja de Ahorros madrileña por importe de 110 millones de pesetas. Los vencimientos de esa hipoteca fueron atendidos por la empresa hasta el año 1975, fecha en la que los compradores de los pisos terminaron de pagar las letras que habían firmado. Sin embargo, a partir de entonces, los pagos de esa hipoteca no fueron atendidos, por lo que el prestador -la Caja de Ahorros- quiso hacer uso del derecho que le asistía y reclamó los pisos que estaban gravados con la ciada hipoteca, aunque sus propietarios lo desconocieran. La deuda existente es de cincuenta millones de pesetas.

Uno de los administradores de la citada empresa, Antonio Coca, disfruta paralelamente de una hipoteca concedida por una entidad bancaria, por importe de 132 millones de pesetas. Al parecer, el citado banco estaría dispuesto a vender a los vecinos el terreno gravado por esa hipoteca -situado en la calle de Ascao- por sólo cien millones de pesetas, para que, después de venderlo, pudieran hacer frente a la hipoteca de la Caja de Ahorros. La operación fue aceptada, en principio, en una reunión mantenida por representantes de los vecinos con el banco en cuestión y la Caja de Ahorros.

Existe, incluso, un posible comprador de esos terrenos, que se muestra de acuerdo en pagar del orden de los 147 millones de pesetas por él. Esto supondría que los vecinos de la calle de Quero sólo tendrían que pagar a la Caja de Ahorros del orden de tres millones de pesetas, toda vez que obtendrían un beneficio con la operación de 47 millones.

Sin embargo, la condición que pone el posible comprador -la cooperativa Copzo- es que la operación sea financiada por la Caja de Ahorros, cosa a la que esta entidad crediticia se opone.

Caso de que la postura de la Cája de Ahorros sea mantenida, la operación destinada a absorber las deudas desconocidas de los vecinos, de la calle de Quero podría dar al traste.

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