UGT y la patronal de la construcción de Madrid firmaron el convenio

El convenio de la construcción de Madrid, uno de los convenios test de la negociación colectiva anual, se ha convertido desde la noche de ayer en una auténtica reválida para el acuerdo-marco UGT-CEOE. La firma unilateral del convenio -ante la negativa de CCOO de suscribirlo- entre UGT y la patronal del sector, AECOM, ha otorgado a este sector el papel de prueba de fuego en el pulso general que sobre el acuerdo-marco sostienen, en la práctica totalidad de los convenios en negociación, UGT-CEOE y CCOO.

Varias horas de negociaciones entre las dos centrales y la patronal y cuatro días de huelga desigualmente secundada por el sector, no lograron modificar sustancialmente los acuerdos y las actitudes presentes en los negociadores la semana anterior. El convenio se ha firmado con ligeras modificaciones sobre el acuerdo de principio, suscrito el viernes 17 de enero, entre AECOM y UGT. El rechazo de CCOO a tal acuerdo es coherente con su oposicion al acuerdor-marco UGT-CEOE, y en parte puede explicar su negativa a firmar el convenio. El convenio firmado ayer por la central socialista y AECOM se ajusta expresamente al acuerdo-marco UGT-CEOE. Porme norizado el acuerdo, que fue vo tado en contra en todos sus artículos por CCOO, consiste en aumentos salariales del 14,5% (medio punto más de lo concedido por la patronal hace ocho días), revisión semestral si el índice de precios al consumo (excluido el precio de la gasolina) supera el 6,75 %, vigencia por dos años (excepto en el tema de salarios), reducción de treinta horas en la jornada anual y compromiso de negociación de 150 unidades de productividad. El convenio fija también un aumento del 14,5% sobre la media dieta y del 13% sobre la dieta completa, y contiene una asunción expresa de la acción sindical que se contempla en el acuerdomarco UGT-CEOE. El convenio, según fuentes de UGT, mejora sensiblemente el acuerdo de principio suscrito hace ocho días por este sindicato y la patronal, que supuso a su vez la desconvocatoria por esta central de la huelga del sector que, a instancias de CCOO, tuvo lugar los días 21, 22, 23 y 24 pasados.

CCOO sostiene que es ilegal el convenio

Comisiones Obreras denunció la ilegalidad de este convenio al estar suscrito exclusivamente por UGT y AECOM, ya que CCOO ostenta el 50% de la comisión negociadora del mismo. Sin embargo, el presidente de AECOM, Aguirre Belver, salió al paso de esta objección que ya se había planteado la semana anterior (véase EL PAIS del 19 de enero), afirmando que era tan válido como el que el año anterior habían suscrito CCOO y AECOM en ausencia de UGT. Al haberse iniciado las negociaciones del inismo con anterioridad a la vigencia del futuro Estatuto de los Trabajadores, el convenio firmado es totalmente lícito.CCOO ha criticado el aumento salarial, que su pone la pérdida de un punto y medio sobre lo reivindicado, la reducción de jornada, que considera -al igual que el aumento de las dietas- insuficiente, y la vigencia de dos años del convenio, entre otros puntos.

Historia de unas negociaciones

Las deliberaciones pata este convenio se iniciaron a primeros de noviembre, Las tablas reivindicativas de CCOO y UGT, aunque diferenciadas, estaban llenas de coincidencias, y en la comisión negociadora se actuó incluso con un solo portavoz para las dos centrales. Frente a ellas, AECOM, que se encontraba reacia al acuerdo-marco, en base a la situación del. sector y a un reciente decreto (29-12-1979) sobre rentas (que modifica el índice de revisión de precios de obra), ofertó un 10% de incremento salarial frente a la reinvindicación de un 16% por ambos sindicatos.Las negociaciones del acuerdo-marco y los debates del Estatuto de los Trabajadores influyeron también en que las negociaciones permanecieran prácticamente sin avance alguno. Las seguridades ofrecidas por el vicepresidente Abril Martorell a los directivos de la patronal de la construcción, hace dos semanas, en torno a la revisión de precios de obras públicas, modificó la actitud de AECOM hacia el convenio y propició el acuerdo con UGT, que ayer se materializó en la firma del convenio.

Prueba de fuego

El convenio firmado ayer previsiblemente va a ser homologado, todavía está vigente este trámite al no haber entrado en vigor el Estatuto de los Trabajadores, y deberá ser acatado por los trabajadores del sector. Comisiones Obreras se encuentra así, ante los hechos consumados, entre la espada y la pared y será muy interesante, de cara a su proyección sobre el resto de la negociación colectiva en marcha, la actitud que a partir de hoy adopte en este sector. Los 80.000 trabajadores de la construcción madrileña convierten a este covenio en la primera prueba de fuego del pulso entre CCOO y UGT-CEOE sobre el acuerdo-marco