Moscú desmiente combates en las afueras de Kabul entre el Ejército afgano y tropas soviéticas
La agencia oficial soviética Tass desmintió rotundamente ayer que unidades del Ejército afgano se hayan enfrentado con tropas soviéticas en las cercanías del aeropuerto de Kabul, como informaron el jueves periodistas occidentales.
En cambio. fuentes de la «rebelión» afgana señalaron ayer combates en el este de Afganistán. tanto en las montañas como cerca de la frontera con Pakistán, concretamente en la ciudad de Jalalabad, donde la resistencia musulmana ha sido atacada con helicópteros por el Ejército soviético. También prosiguen los soviéticos su ofensiva antiguerrillera en el oeste del país, cerca de la frontera con Irán.De modo general. los «rebeldes» parecen haber renunciado a oponer una resistencia frontal al Ejército de la URSS, excepto cuando cuentan con armamento pesado procedente del Ejército afgano.
Insistentes rumores difundidos por la agencia de prensa hindú PTI y varios rotativos de Nueva Delhi aseguran que elementos armados del Ejército chino luchan en el noroeste de Afganistán junto con la guerrilla. Esta información, que el Departamento de Estado norteamericano se negó a comentar, fue desmentida por fuentes oficiales en Pekín. En todo caso. para demostrar su apoyo a Pakistán, el ministro chino de Asuntos Exteriores. Huang Hua. llegó ayer a Islamabad en visita oficial de seis días de duración. Coincidiendo con su llegada a la capital paquistaní, la prensa soviética recordó ayer que no existía ninguna amenaza por parte de la URSS contra Pakistán, país que los políticos occidentales «quieren arrastrar en sus sucias aventuras contra Afganistán».
Con anterioridad a la llegada del jefe de la diplomacia china a Islamabad, el presidente paquistaní. Zia Ul Haq. en una entrevista concedida al Washington Post, juzgó insuficientes los créditos de cuatrocientos millones de dólares que EEUU proyecta conceder a su país. Para el jefe de Estado paquistaní su país necesita. en sustitución de los acuerdos de defensa de 1959, «un buen tratado de amistad y ayuda económica y militar» para poder defender Pakistán.
En Moscú, la prensa reanudó ayer sus ataques contra el presidente estadounidense. Jimmy Carter, acusándole de provocar «una peligrosa desestabilización» de la situación internacional. El diario Sovietskaya Rossia afirmaba ayer que «EE UU se ha convertido en un socio no fiable y poco serio en las relaciones interestatales», a causa de un presidente sujeto «a impulsos de fantasías, caprichos, estallidos emocionales y consideraciones de interés pasajero».
El Parlamento Europeo, reunido ayer en Estrasburgo, adoptó una resolución en la que solicita a la CEE se envíe una ayuda financiera y alimenticia urgente para el medio millón de refugiados afganos en Pakistán.
Por último, en una entrevista publicada ayer por el rotativo parisiense Libération (extrema izquierda), Manuel Azcárate, miembro de la ejecutiva del PCE, afirma: «Es inadmisible que una gran potencia, invocando el nombre del socialismo, utilice la fuerza para imponer su voluntad a un país vecino».
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.