USO negociará con UGT y CEOE su adhesión al acuerdo-marco
Tras un debate de cinco horas, que ha sido calificado como de durísimo y de muy positivo, tanto por Manuel Zaguirre, secretario general de USO, como por José Corell, secretario de relaciones políticas y sindicales, defensores de tesis opuestas, ha sido decidida la adhesión negociada de la USO al acuerdo-marco suscrito por UGT y CEOE. Esta decisión, caso de llegarse a un acuerdo, extendería el acuerdo negociado entre UGT y CEOE y haría más posible su aplicación en las empresas, dificultada tras el descuelgue, a última hora, de CCOO. La resolución aprobada especifica que se negociará con CEOE y UGT la adhesión de USO, sobre la base de que se cuente con la presencia de USO en la negociación de todos los convenios a los que se haga extensivo el acuerdo-marco.
«El resultado de 178.729 votos a favor y 143.163 en contra de la adhesión al acuerdo-marco es un buen resultado, en un país acostumbrado a sospechosas unanimidades», ha manifestado Manuel Zaguirre a Efe.Esto, así como el fuerte debate existente en la organización, es propio de una estructura democrática como la de USO, añadió, pero es el mejor síntoma de su buen funcionamiento.
«Nosotros hemos situado el debate, en todo momento, dentro de unas coordenadas estrictamente sindicales.»
En cuanto a la posibilidad de que se impida la presencia de USO en base a que no tenga el mínimo del 10% de representatividad exigido en el mismo convenio-marco, Zaguirre dijo que no había ninguna norma jurídica, todavía, que lo impidiera realmente, y que ese era uno de los temas a negociar.
«Hasta el momento»,, añadió, «no se ha producido ninguna negociación con UGT sobre este tema, ya que había que esperar el mandato del Congreso. Lo único que ha habido son conversaciones telefónicas con el antiguo compañero de muchos años que es Zufiaur, pero en ningún caso negociación.»
«Habrá que esperar a ver cuál es la actitud de UGT, ya que mientras que su postura con respecto a las relaciones con USO sigue siendo totalmente cerrada, por otra parte se da cuenta de que necesita de nosotros para esta relación, que sería muy positiva para equilibrar las relaciones entre los tres grandes sindicatos del país.»
Con la adhesión al acuerdo-marco, explicó Zaguirre, no se están favoreciendo bloques de ninguna clase, «sino que hay que juzgarla desde un punto de vista puramente sindical, independientemente del modelo ideológico de cada central. Lo importante es que con él se aclarará la jungla de convenios que tenemos que negociar».
Por encima de esta adhesión prevalecen los caracteres diferenciales de cada organización. USU seguirá siendo el sindicato de la autonomía y de la apertura, totalmente opuesto a lo que ocurre en UGT y CCOO, cuyos criterios son modelados, respectivamente, por el PSOE y por el PCE.
Finalmente, el secretario general de USO dijo que él no había defendido la firma con un criterio oportunista basado en una posible obtención de ventajas, sino porque entendía que era un paso para mejorar la situación económica del país.
José Corell, por su parte, ha manifestado que el resultado de las votaciones supone, en cierta medida, una derrota no personal, sino de la línea aprobada en el Congreso, pero que era de esperar, dada la composición del consejo, favorable a Zaguirre.
«En cualquier caso», dijo, «nosotros aceptamos democráticamente el resultado de las votaciones y en ningún caso se va a producir una escisión por este tema, a pesar de que podríamos hacer la crítica de que el tema no ha sido debatido por las bases."
«Nuestra actitud», añadió, «será la de promover una dialéctica interna de debate y avance sindical, aunque donde puede haber crisis es en las federaciones y uniones provinciales.»
Sobre la valoración del acuerdo marco, el secretario de relaciones políticas de USO dijo que se trataba de una de las decisiones más importantes adoptadas por la organización en los últimos tiempos, ya que significa un poco el tipo de sindicalismo que va a hacer USO en un futuro.
USO quiere negociar los convenios
La resolución del consejo confederal, que fue presentada por el secretario general, Manuel Zaguirre, expone que USO fue la primera organización sindical que se pronunció por la necesidad de un acuerdo-marco para la negociación colectiva entre las centrales sindicales y las organizaciones patronales, exponiéndolo oficialmente el pasado mes de septiembre a CCOO, UGT, CEOE y CEPYME, a pesar de lo cual se vio excluida de la mesa negociadora del acuerdo-marco.Pese a ello, USO ha considerado que el acuerdo-marco suscrito entre UGT y CEOE contiene aspectos sustanciales de su política reivindicativa en materia salarial, derechos sindicales y otros, y supone un punto de referencia valioso para homogeneizar la próxima renovación de convenios y equilibrar los contenidos.
El reconocimiento expreso de su capacidad y presencia en todos los convenios colectivos donde USO tenga acreditada su implantación deberá formularse sin condicionamientos de representatividad de ningún tipo, estableciendo que los mínimos de representatividad exigibles para negociar tendrán vigor cuando lo tengan las leyes donde se contemplan y cuando se celebren elecciones sindicales con las debidas garantías en todos los aspectos.
Para la Unión Sindical Obrera, la persistencia del actual bloqueo a la inversión productiva, los intentos fraudulentos de descuelgue empresariales respecto al acuerdo-marco y las posturas regresivas o de cerrazón a la hora de interpretar y aplicar en la práctica contractual los contenidos del acuerdo-marco serán considerados una violación empresarial de hecho del acuerdo con todas las consecuencias inherentes y, en cualquier caso, no renuncia. a su libertad de acción sindical para hacer cumplir, respetar o rechazar cualquier violación o aplicación restrictiva del referido acuerdo.
El consejo confederal emplaza al Gobierno y a la Administración a negociar un acuerdo global de similares características al suscrito por UGT y CEOE, referido al sector público, y estima que es necesario reactivar el proceso negociador para establecer una alternativa válida en términos de estabilidad en el empleo y relanzamiento de la actividad productiva para los sectores industriales en crisis.
Asimismo, reitera la necesidad de una alternativa de largo alcance a la crisis económica y al paro que implique a las fuerzas sociales y políticas más significativas.
Por su parte, UGT y CEOE han coincidido. en afirmar que estudiarán conjuntamente con USO la resolución aprobada por el consejo confedera¡ de esta central sobre ratificación del acuerdo-marco CEOE-UGT.
José María Zufiaur, secretario de relaciones sindicales y políticas de UGT, manifestó que el acuerdo marco está abierto a todas las organizaciones, tanto empresariales como sindicales, que quieran suscribirlo, pero que cualquiera de éstas tiene que respetar las cláusulas del acuerdo.
José María Cuevas, secretario general de la CEOE, señaló que la resolución del consejo confederal de USO deberá ser estudiada por las tres organizaciones. De cualquier modo, dijo, el 10% de representatividad se puede componer de muchas maneras, por lo que se podría llegar a un acuerdo siempre contando con la opinión de UGT. En este sentido, indicó que antes de la firma del acuerdo ya se tenía prevista la adhesión de otras organizaciones, por lo que no se presentarán muchos problemas.
