La policia incaúta cocaína casi pura valorada en 200 millones de pesetas

Dieciocho personas, hombres y mujeres, en su mayoría de raza gitana, presuntos integrantes de una organización dedicada al tráfico de cocaína, han sido detenidos en los últimos días por la policía judicial de Madrid. A los detenidos se les ha intervenido cuatro kilogramos de esta sustancia, de una pureza del 92%, que según fuentes policiales acababan de introducir en nuestro país, procedente de Bolivia.

La droga, una vez adulterada y vendida, podría tener un valor aproximado a los doscientos millones de pesetas.Como principales miembros de la organización se encuentran detenidos los hermanos Francisco y Rafael Campos Amaya, conocidos por Quini y El Negrete, de 39 y 37 aflos, respectivamente. Asimismo han sido arrestadas cinco mujeres como introductoras de la droga en nuestro país por vía aérea. Las «correo» son Rosario Jiménez, de treinta años; María Jiménez, de veintidós; Manuela Salazar, de 49; Wenceslada Jiménez, de veintiocho, y Ana Amaya, de veintidós.

En calidad de expendedores han sido detenidos también Adelaida Amaya, de sesenta años; Juan Miranda, de 53; Jesús Montes, de veintiséis; Josefa Camacho, de veinticuatro; Rocío Rodríguez, de veintitrés; Manuela Serrano, de veinte; Isabel Campos, de veintisiete; Rafael Chamorín, de veinticuatro; Pedro Manuel Jiménez, de veintiocho; Agustín Moreno, de 31, y José María Dual, de 39.

Se les intervino, además de la cocaína, joyas valoradas en dos millones de pesetas, entre las que se encuentra una sortija de brillantes de unas 400.000 pesetas, 980.000 pesetas en metálico, dos pistolas de calibres nueve y 6,35 milímetros, otra de gases y otra antigua. También les ha incautado la policía dos automóviles marca Ferrari, un Alfa Romeo y otro Javelin, valorados, los cuatro, en unos diez millones de pesetas y propiedad de los hermanos Amaya, que a pesar de no tener ocupación laboral alguna gastaban grandes sumas de dinero en salas de juego madrileflas, propinas y viviendas de lujo.

La mayoría tiene numerosos antecedentes penales. Todos han pasado a disposición del juez.