Críticas judiciales en Italia a las medidas antiterroristas
El presidente del Tribunal Constitucional ha advertido al Gobierno italiano que «no caiga en la trampa de los terroristas», mientras que veinticuatro magistrados de Milán se han manifestado rotundamente en contra de las medidas adoptadas, por considerarlas «inútiles» y peligrosas para el mantenimiento de las garantías previstas en la Constitución.En unas cautas declaraciones sobre el conjunto de medidas antiterroristas que entró en vigor el martes, el presidente del Tribunal Constitucional, Leonetto Amadei, ha subrayado que el objetivo de las organizaciones armadas es obligar al Estado a quebrantar los principios de la convivencia democrática, «atenuando ciertas garantías constitucionales».
«Sin ningún afán polémico», según sus propias palabras, Amadei recordó el artículo 13 de la Constitución, según el cual la libertad de las personas sólo puede ser limitada por la autoridad judicial y «únicamente en los casos y formas previstos por la ley».
«Pensar que el respeto a las garantías constitucionales es excesivo bajo el pretexto de la necesidad del momento significa entrar en un proceso de degradación de la Constitución, que se traduciría en posibles soluciones de tipo autoritario.»
Más tajantes han sido los veinticuatro magistrados de Milán, ciudad que, tras el nombramiento del general Della Chiesa como comandante de la división Pastrengo, se ha convertido en cuartel general de las operaciones antiterroristas.
El documento suscrito por los magistrados sostiene que, una vez más, se ha recurrido a leyes excepcionales, insistiendo en el aspecto represivo y descuidando cualquier iniciativa de prevención «en el terreno de cultivo del terrorismo».
La corrupción y el paro
El mal gobierno, la corrupción, el paro y la crisis económica serían factores determinantes del recurso a la violencia. «Por consiguiente», opinan los firmantes del documento, «necesitamos reformas orgánicas y no leyes especiales, que pueden atentar contra el ordenamiento constitucional y favorecer, en lugar de combatir, el terrorisrno.»Sobre la ampliación del tiempo de detención en comisaría y la posibilidad de que los detenidos sean interrogados en ausencia de sus abogados, los magistrados milaneses insisten en que se trata de una medida «inútil» de cara a posteriores investigaciones.
«El detenido tiene derecho a no responder y de esa forma no se puede obtener ningún resultado, a menos que se intente legitimar, de hecho, el uso inadmisible de medios de coacción física o psíquica.»
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