El gobernador civil de Navarra desmiente que se torture en la comisaría de Pamplona

El gobernador civil de Navarra, Eduardo Ameijide, ha asegurado que en la comisaría de policía de Pamplona no se tortura ni se producen malos tratos a los detenidos. «Si se produjese algo de esto por alguna persona aislada», ha manifestado el señor Ameijide, «serían sus propios compañeros, el comisario jefe y, por supuesto, yo mismo los primeros interesados en exigir las responsabilidades a que hubiera lugar, con independencia de las que pudieran corresponder a los tribunales de justicia.En una entrevista publicada por Diario de Navarra, el gobernador civil de la provincia afirma, en respuesta a las declaraciones de José Antonio Urbiola (Herri Batasuna), vicepresidente del Parlamento Foral de Navarra, que «no es moneda de cambio corriente la tortura en la comisaría, sino las coacciones, las amenazas y los asesinatos cometidos por individuos que, bajo la demagogia de pretender defender la libertad de un pueblo, los derechos de sus gentes y los derechos humanos como principio, atentan contra ellos y, de manera especial, contra el derecho a la vida». En este sentido, Eduardo Ameijide precisa que «ETA es quien atenta contra los derechos humanos y las libertades que dice defender; ETA es quien no respeta la voluntad mayoritaria del pueblo y la democracia; ETA es quien amenaza, coacciona y asesina; ETA es, en definitiva, quien pretende imponer la dictadura de sus metralletas. Moneda de cambio corriente también es que los que afirman la existencia de tortura son los que convocan y apoyan manifestaciones en las que se hace apología del terrorismo y se injuria a las fuerzas de seguridad del Estado, y son los que jamás adoptan acuerdos de condena de los asesinatos cometidos por la organización terrorista ETA».

Sobre la denuncia efectuada ante el Parlamento Foral de Navarra por el ex ministro de Justicia durante la República y actual parlamentario de PNV, Manuel de Irujo, en la que se afirmaba que en la comisaría de policía de Pamplona se habían torturado en los últimos días a varios detenidos, a los que la policía acusaba de pertenecer a ETA militar, el gobernador civil señala que «me resisto a creer que don Manuel de Irujo haya afirmado la aplicación de tormento, y de haberlo manifestado, sólo lo entiendo en una utilización de buena fe. Estaría de acuerdo con él en que sería un baldón que la policía lo hiciese, al igual que espero que él estaría de acuerdo conmigo en que también sería un baldón hacer tal afirmación sin tener las pruebas que lo confirmen. Lo que sí se puede constatar es que siempre que se van a celebrar juicios contra terroristas o se apunta la petición de amnistía, que, por otra parte, no cabe constitucionalmente, se produce una campaña que trata de desprestigiar a las fuerzas de seguridad del Estado. Puedo afirmar que estas fuerzas, ni con campañas de desprestigio ni con aumento de la presión terrorista, van a decaer en su lucha y no van a permitir que una minoría automarginada vaya a destruir la democracia nacida de las urnas».